El Parlamento pide un plan de reducción antes del verano

El Parlamento vasco ha solicitado hoy al Gobierno de Iñigo Urkullu que le presente antes del próximo verano un plan para reducir la estructura y el gasto del sector público en la comunidad autónoma. El PSE-EE había planteado una iniciativa original, pero finalmente ha acordado un texto con el PNV y UPyD, que también ha sido apoyado por el PP.

EH Bildu ha sido el único grupo que ha votado en contra porque ha considerado que se están estableciendo ya las conclusiones de dicho informe, antes de elaborarlo, con la decisión del Gobierno vasco de reducir la estructura del sector público un 25% a lo largo de la legislatura.

En su resolución, el Parlamento insta al Ejecutivo a que el plan de redimensionamiento y racionalización del sector público tenga como objetivo "reducir su estructura y gasto corriente, así como el número total de entidades, hasta su nivel óptimo" para lograr una administración "más eficiente, moderna y transparente".

Además, la Cámara invita a las diputaciones forales y a los municipios vascos a colaborar con el Gobierno en este objetivo y a impulsar estrategias similares en los entes, sociedades y fundaciones en los que participen, con el fin de conseguir "la máxima eficiencia en la gestión del sector público vasco".

El portavoz socialista en la Cámara, José Antonio Pastor, ha recordado que a principios de enero el Gobierno dio a conocer su decisión de reducir una cuarta parte el número de sociedades públicas a lo largo de los próximos cuatro años, pero sin posteriores concreciones. Pastor ha dicho que su grupo no pretende que se privaticen servicios públicos o empresas, sino que se eliminen las sociedades y organismos que no se sabe ni si se dedican a algo. Ha culpado a los anteriores gobiernos nacionalistas de ser los "responsables fundamentales" de la, ha dicho, "galaxia de entidades, sociedades y empresas" públicas que persisten.

Ana Otadui (PNV) ha recordado que el Gobierno de Urkullu ya ha comenzado con esta tarea, al haber reducido un 20% el número de altos cargos, y ha dicho que el objetivo de este plan será evitar actuaciones dispersas y aumentar las sinergias, pero manteniendo los servicios esenciales y el empleo público.

Precisamente a esto se ha referido Arantza Quiroga (PP) quien ha pedido a todos los grupos que sean coherentes cuando el Gobierno proponga medidas "difíciles" después de que se le haya reclamado una racionalización del entramado. Quiroga ha considerado un "engaño" hablar de la necesidad de un redimesionamiento y dejarlo en la reducción de altos cargos y mantener el mismo gasto.

Gorka Maneiro (UPyD) ha considerado que esta reclamación de un plan es un paso más en la buena dirección, pero ha criticado que el PSE-EE reclame al actual Gobierno lo que el anterior, presidido por Patxi López, no hizo.

El único grupo que ha votado en contra ha sido EH Bildu. Su parlamentaria Arri Zulaika ha defendido que todo plan que elabore el Gobierno debe ir dirigido a mantener los servicios de calidad y la justicia social, y se ha mostrado contraria a la "tentación de adelgazar los servicios públicos".