El PSC reitera que quiere “voz propia” en el Congreso pero dentro del PSOE
Los socialistas catalanes reclaman autonomía para poder votar distinto
Los socialistas catalanes no pedirán al PSOE formar un grupo parlamentario propio en el Congreso, pero insisten en que quieren “voz propia” y que no renuncian a votar distinto en temas del autogobierno de Cataluña, como ya ocurrió el día 26 con la resolución del derecho a decidir que tanto ha tensado las relaciones entre ambos partidos.
Jaume Collboni, portavoz del PSC, explicó ayer que los socialistas catalanes siguen teniendo los mismos planteamientos que antes de esa votación y que los seguirán defendiendo en las conversaciones que están manteniendo con el PSOE para buscar un nuevo marco de relaciones.
“El PSC renuncia al grupo parlamentario. Eso es lo que aprobó el último congreso del partido”, dijo Collboni. Sin embargo, los socialistas catalanes seguirán reclamando al PSOE la “articulación de una voz propia” para “defender en Madrid lo mismo que en Cataluña”, añadió. En este sentido, el PSC reclamó ayer a CiU e Iniciativa, que se sumen a su propuesta de reclamar en el Parlament la creación de una comisión de estudio para reformar la Constitución. Se trata de una propuesta que fue presentada en el Congreso el mismo día 26 y que fue derrotada por el PP, pero que obtuvo el apoyo de los diputados de CiU, además de todo el grupo parlamentario socialista.
El congreso del PSC que encumbró a Pere Navarro al frente del socialismo catalán renunció al grupo parlamentario propio a cambio del compromiso de redactar un nuevo marco de relaciones con el PSOE que sustituya al vigente desde 1978. Ese acuerdo nunca llegó, pero la votación del día 26 a favor de una consulta pactada lo cambia todo y ese pacto se antoja más necesario que nunca, especialmente después de que algunos dirigentes territoriales del PSOE planteasen abiertamente la necesidad de romper con el PSC.
Las direcciones de ambos partidos han descartado la ruptura, creen que han de enfriarse las tensiones, reconstruir puentes y que es el momento de hablar claro por ambas partes y dejar escritos los compromisos mutuos. Por eso, dirigentes del PSOE y del PSC iniciaron ayer los contactos —por el momento, solo telefónicos— para negociar la revisión de ese protocolo de relaciones. La ronda de conversaciones se podría prolongar durante meses, según coinciden ambas direcciones.
“Esto se gestiona con calma y lo iremos concretando en un documento, pero también con mucha discreción y sin focos”, explicó un dirigente del PSC. “Esto no se arregla montando una ponencia rápida que aprueba un documento en dos días. Hemos empezado a hablar, pero eso no quiere decir que hayamos entrado ya en el contenido”, apostilló.
Mientras tanto, el exlíder del PSC y expresidente de la Generalitat José Montilla avaló ayer la estrategia de su sucesor en el partido, Pere Navarro, de defender el derecho en el Congreso y desmarcarse del PSOE por primera vez en esa cámara. Montilla dijo en TV-3 que Navarro “ha hecho lo que tenía que hacer” y, añadió que “tiene mi comprensión y mi apoyo”. Asimismo, el expresidente catalán se ha referido a la diputada Carme Chacón, que no participó en la votación y se desmarcó de los otros 13 diputados del PSC.
“En un sistema electoral como el nuestro de listas cerradas, en las que los diputados deben responder de acuerdo con las orientaciones del programa electoral con el que se han presentado y la orientación de la dirección del partido”, dijo Montilla, quien dijo que una consulta soberanista en Cataluña debe servir “no para irse de España”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.