Mas presenta su plan soberanista a los dirigentes liberales europeos
El presidente catalán vuelve a comparar Cataluña y Escocia
Artur Mas puso ayer en marcha lo que él llama “proceso de internacionalización del conflicto catalán” que tantos quebraderos de cabeza ha llevado al Gobierno central. El presidente catalán aprovechó el entorno amable que le ofreció la Alianza de los Demócratas Liberales por Europa (ALDE) para defender el derecho a decidir de Cataluña y el proceso soberanista en un encuentro de gobernantes liberales celebrado en Ámsterdam (Países Bajos).
Mas explicó, tras encontrarse con los dirigentes liberales, que cuando se reúne con líderes europeos y les explica el derecho a decidir “como un tema democrático, pacífico y de grandes mayorías, ellos, que son gente demócrata, lo entienden perfectamente”. Al encuentro participaron, entre otros, el viceprimer ministro británico, Nick Cleg, y el primer ministro holandés Marc Rutte.
El presidente catalán remarcó que lo entienden “porque es un derecho democrático” y lo comparó con el proceso que se está siguiendo en Escocia respecto al Reino Unido. Según un comunicado hecho público por el Gobierno catalán, Mas explicó a los líderes europeos presentes en la cumbre que “para nosotros el derecho a decidir es un tema democrático, también de supervivencia como país y de progreso económico y social, y que, por tanto, hay una determinación grande en la mayoría del pueblo catalán para seguir este camino”.
Para nosotros el derecho a decidir es un tema democrático, también de supervivencia como país y de progreso económico y social” Artur Mas
El presidente aseguró que se lo ha querido explicar personalmente para que “tengan información muy directa sobre cómo veo este proceso”.
Mas insistió en comparar el proceso catalán con el escocés y subrayó el “talante democrático” del Gobierno británico, que ha negociado con el escocés la celebración de un referéndum, la fecha, la pregunta y el hecho de que el resultado será vinculante. Al mismo tiempo, lamentó que “en España no se va en esta línea”, pero aseguró que piensa hacer “todo lo que haga falta” para intentar que el Gobierno central respete “el derecho a decidir”.
El viaje de ayer a Ámsterdam es el primero que Artur Mas hace al exterior desde que fuera reelegido presidente de la Generalitat. En la hoja de ruta que CiU y ERC pactaron para garantizar la investidura de Mas estaba, precisamente, la internacionalización de las demandas catalanas, algo que el Gobierno central pretende combatir con la nueva ley de acción exterior, que aspira a tutelar de cerca las actividades de las autonomías en sus relaciones internacionales. Mas anunció ayer que aspira a saltarse cualquier impedimento que proceda del Gobierno central, pero no será fácil. Ya en su último viaje de la pasada legislatura, una visita oficial a Moscú, la comitiva catalana vio cómo el apoyo diplomático del Gobierno se reducía a la mínima expresión.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.