Contas ratifica su informe por el desvío de facturas y la Xunta lo rebaja a “opinión”

Feijóo criticó ayer a la Generalitat de Cataluña por impulsar una declaración soberanista “cuando no es capaz de pagar las facturas” pero, a continuación, justificó que su Gobierno desviase 411 millones de euros en gastos de 2010 al ejercicio siguiente asegurando que ese proceder “no pone en cuestión el déficit, que es lo fundamental”. Feijóo defendió su actuación y rebajó a la categoría de “opinión” el informe crítico del Consello de Contas que, en forma de borrador, destapó esta irregularidad contable de la Xunta en plena campaña electoral. El documento acaba de ser ratificado.

Interpelado sobre la declaración de soberanía del Parlamento catalán, Feijóo aseguró que “el único sujeto de soberanía es el pueblo español” y mostró sus sospechas sobre el debate abierto ya que cree que “no es casual a las pocas horas de concretar que el déficit de Cataluña se excede en más de un 50% del objetivo que tenía”. “Cuando no se es capaz de pagar las facturas y mantener la solvencia de las cuentas hay que buscar un enemigo exterior”, sentenció, para destacar que Galicia sí cumple sus objetivos de déficit y desvincular ese indicador del desvío de facturas que le censura Contas.

El ente fiscalizador gallego, en un informe elaborado por el ya fallecido José Antonio Orza, exconselleiro de Fraga, advierte que la Xunta retrasó de 2010 a 2011 la contabilización de facturas por 188 millones de euros en el Sergas y estima que en el resto de la Administración el desvío fue de 223 millones: en total 411 millones. Cuando se desvelaron estos datos en la pasada campaña electoral, Feijóo negó las cantidades y se escudó en que la Xunta aún no había presentado sus alegaciones a ese informe (“borrador”, lo calificó), aunque luego admitió que de 2009 a 2010 ya se habían desplazado otros 80 millones.

Ese informe ha sido ahora aprobado de forma definitiva por el Pleno del Consello de Contas y, aunque aún no ha sido remitido al Parlamento, fuentes conocedoras de su contenido ratifican que no se han tenido en cuenta las alegaciones de la Xunta y se reitera el desvío de facturas. Así que Feijóo dice ahora que “en ese informe definitivo, aún desconociendo la cuantía a que se refiere Contas, no se pone en cuestión el déficit de la comunidad, que es lo fundamental” y que, según dijo, solo puede cuantificar el Estado.

Feijóo llegó a decir sobre la forma de contabilizar facturas que él tiene su “opinión, que no tiene por qué ser coincidente con la de Contas”, y aseguró que la Xunta usa “los mismos mecanismos de cómputo que se usaron otros años”. El desvío de facturas fue habitual en los Gobiernos de Fraga, desapareció con el bipartito y volvió con el actual Ejecutivo.