Ondarroa logra pescar 12,5 millones

Se puede decir que la suerte ha llegado corriendo a Ondarroa. La localidad vizcaína, de apenas 9.000 vecinos, ha sido la más agraciada en Euskadi en el Sorteo Extraordinario de Navidad gracias al buen ojo para escoger números de los organizadores del Memorial Egia-Iriondo, una carrera atlética muy popular entre sus habitantes. Fueron ellos quienes adquirieron las 25 series de uno de los terceros, el 64084, cuyos 250 décimos, muy repartidos en bares, han supuesto para Ondarroa una paga extra de 12,5 millones de euros.

La fortuna ha resultado esta vez algo esquiva para Euskadi, donde el sorteo ha dejado en premios un total de 15.527.000 euros. Los vascos jugaban con la mirada puesta en el Gordo casi 140 millones (en concreto 139.824.680 euros, 64 por habitante). Así que los premios suponen el 11,1% de lo jugado, poco más de un euro de cada 10 apostados. El año pasado, Euskadi jugó 147,6 millones y recuperó 41 millones, casi uno de cada tres apostados.

Este es el balance de la fortuna de hoy.

EL GORDO (76058)

El más deseado premio de la Lotería Nacional ha pasado de largo por Euskadi, dejando solo sendos décimos, cada uno de los cuals supone 400.000 euros. Los dos se vendieron por sendos terminales informáticos, uno en Bilbao y otro en Derio. Y ninguno de ellos en una Administración tradicional.

"Lo más posible es que alguien lo haya pedido al azar". Eso intuye Miguel Goldaracena, uno de los responsables de la delegación de Loterías y Apuestas del Estado en Bizkaia, sita en la céntrica calle Diputación, sobre el décimo premiado.

Esta delegación, dependiente de la Diputación vizcaína, es la única de las tres de su tipo que existen en España —las otras dos son las de Barcelona y Jaén, también de sus respectivas Diputaciones— que cuenta con un punto de venta directa de todos los sorteos de Loterías del Estado. Y todos ellos, con un ticket expedido por un terminal informático. Un Gordo, pues, sin el décimo tradicional.

En la delegación trabajan 22 personas, personal laboral adscrito a la Hacienda foral, que se encargan de las tareas de intendencia, atención y coordinación de los 278 puntos de venta de Loterías en Bizkaia, tanto las administraciones tradicionales, como los puntos mixtos. Estos son aquellos negocios que cuentan con un terminal informático de venta para los sorteos, pero cuya actividad principal es otra (estancos, bares, etcétera).

Desde hace algo más de dos años, cuando se permitió la venta de Lotería Nacional a través de terminales informáticos, la delegación despacha también boletos para este sorteo, además de los que ya vendía (Primitiva, Bonoloto, Euromillones, etcétera). Y nunca había dado un premio de Lotería —sí de otras modalidades—, así que se estrena con el Gordo.

Esa condición de delegación y el ser solo un décimo se ha traducido en el escaso ambiente de premio vivido allí esta mañana, por la que casi han pasado solo periodistas. "No es lo mismo que una administración de barrio que reparta entre la gente y para la que el premio supone una publicidad extraordinaria", reconoce Goldaracena. Eso sí, la delegada de Loterías en Bizkaia, Maite Madariaga, confía en que ahora los ciudadanos se animen más a jugar también a estos sorteos a través del terminal informático.

Uno de esos puntos mixtos en los que se puede apostar a través de ese tipo de terminales es la pequeña tienda —apenas 20 metros cuadrados— que Juan Amancio Rivera y su esposa Mari Asun Henares poseen en la Herriko Plaza de Derio. "Es el primer premio de Lotería que damos y hace especial ilusión", responde ella, eufórica, por el teléfono que le acaba de pasar su única hija, de 18 años, preguntando por la celebrity. Y es que Mari Asun no dejaba de atender el teléfono y congratularse con los vecinos que por allí han ido, con algunos de los cuales ha cumplido el en estos casos habitual rito del brindis.

El matrimonio abrió el local en 2005 tras cerrar el bar que antes tenían. Ya saben lo que es repartir premios, pero en otros sorteos. "Los tengo aquí en cuadros", dice ella, repasando el millón y pico de 2008, los 217.000 euros de 2011, etcétera. Desde hace algo más de dos años también Lotería Nacional por terminal, e igualmente se ha estrenado en premios con el Gordo. "Por aquí no creo que pase quien tenga el premio, que lo pude mirar en cualquier sitio", remata.

TERCER PREMIO (64084)

Aitor Arrizabalaga es un hombre abrumado por la fiesta que se ha organizado ante su establecimiento de lotería, uno de los dos que existen en Ondarroa. “Todo se ha vendido en décimos y no en participaciones. Las series las adquirió una sociedad deportiva muy conocida en el pueblo que no quiere dar a conocer su nombre”, explica Arrizabalaga.

No ha tardado en saberse que esa entidad es el grupo que organiza el Memorial Egia-Iriondo, la carrera que el pasado 16 de diciembre disputó su 28ª edición. Varios de sus componentes celebraban luego la suerte con una comida.

La totalidad de los décimos se han vendido en bares del pueblo, por lo que el premio está repartido entre otras tantas personas, asegura Arrizabalaga. Inicialmente, su administración recibió 45 series de este número, pero devolvió 20 de ellas, lo que hubiera elevado la cuantía repartida en otros 10 millones de euros.

Es la primera vez que en Ondarroa cae un premio de esta importancia, después de que en 1985 vendiera una parte de un quinto premio. "50.000 euros de premio no nos va a sacar de pobres, pero es una alegría cuando hay crisis", añade.

De este mismo número se ha venido otra serie íntegra en la administración número 16 de San Sebastián y un décimo suelto en un terminal informático en el bar Trinkete, en el Paseo de Martutene. Otros 550.000 euros más entre ambos. Mari Mar, una de las responsables de esa administración de la calle Bergara, es la primera vez que en 13 años ha vendido un premio de la Lotería de Navidad. En ventanilla ha repartido 10 décimos del 64084, que han recaído en clientes que no puede identificar. Ha recibido con “mucha alegría e ilusión” la noticia y espera que le suponga más ventas para El Niño.

QUINTO PREMIO (49257)

Cuando los niños de San Ildefonso han cantado el cuarto quinto premio en salir (49257), José Ramón, uno de los responsables de la administración número 2 de Irún estaba ensayando con el coro al que pertenece. Así que ha salido corriendo hacia la administración porque allí se han vendido 34 series de ese número. Suponen 2.040.000 euros, el segundo mayor pellizco que ha dejado el sorteo en Euskadi, tras Ondarroa.

“El premio está muy repartido porque 29 de las 34 series las ha repartido la zapatería Herrero de Irún en participaciones entre sus clientes”, señala. Este despacho de lotería recibió 45 series del 49257, pero devolvió 11 de ellas. Del resto, cinco series se han adquirido en ventanilla, asegura José Ramón, quien no conoce a los compradores.

El grueso del premio se lo ha llevado la referida zapatería, que ha repartido 1.740.000 euros en boletos de cinco euros cada uno. José Ramón asegura que el grueso de sus ventas, el 85% aproximadamente, tiene como destino “grandes grupos”, principalmente empresas, comercios y peñas, por lo que tiene “perfectamente localizados” a los que se llevan los números de la lotería. Y añade que recibir un premio así supone “mucha repercusión” y “una buena publicidad” para su establecimiento.

QUINTO PREMIO (11419)

El primer quinto en salir en el sorteo ha llevado la alegría a Urretxu y a Vitoria. Aitor Mendia es el responsable de la única administración de lotería de esa localidad guipuzcoana, que ha vendido una serie completa (diez décimos) del 11419. “Aún tengo que revisar si lo hemos vendido aquí, pero así parece”, asegura poco después de escuchar el resultado del sorteo navideño. Por su despacho no había pasado aún a media mañana ninguno de los 10 agraciados, porque, según afirma, la serie se ha vendido en ventanilla y “en décimos sueltos”, por los que se cobrarán 6.000 euros cada uno.

“En el pueblo habrá 10 agraciados a los que no conocemos”, afirma Mendia, quien reconoce que este año las ventas no han ido tan bien como otros años: “Se ha vendido menos, porque donde no hay, no hay”. Urretxu es una pequeña localidad guipuzcoana de clase obrera y con una fuerte implantación industrial. Mendia espera que la suerte que han repartido se traduzca en “un aumento del estatus” de su administración y de este modo consiga “mejorar la venta de lotería del Niño”.

“Repartir alegría es el mejor trabajo del mundo”, dice la responsable de una administración de Vitoria

En una recientemente estrenada administración de lotería, ubicada en el centro comercial Leclerc del barrio vitoriano de Zabalgana, una emocionada Miriam Sarasua explica que el número llegó hace escasas semanas a su local, Los Dos Patitos, porque tuvieron que pedir una segunda consignación.

También aquí se ha vendido una serie completa, entre las familias del barrio. Una de ellas, trabajadores en la fábrica de Mercedes, ha pasado más tarde por su local ya con algún plan hecho para los 6.000 euros que han ganado: un viaje a Nueva York.

“Repartir alegría es el mejor trabajo del mundo”, dice Sarasua, quien, pese a la crisis, ha “vendido mucho, hasta 100 series de algunos números” para el Gordo. Para su administración, inaugurada hace escasos tres meses, es una jornada especial, ya que la ilusión por la lotería viene de familia. El padre de la propietaria “gasta todos los años la paga extra en lotería”. “Es una tradición familiar que hemos vivido siempre con mucha intensidad y que ahora nosotros repetimos con la fecha de nacimiento de nuestro hijo”. “le hemos dado la alegría de su vida a mi padre”, remata.

QUINTO PREMIO (22343)

Remata la corta lista vasca de la suerte Lasarte-Oria, donde se ha vendido también por terminal informático un décimo del segundo quinto en salir, el 22343. En concreto, ha sido en un estanco  sito en la calle Zumaburu de la localidad guipuzcoana.