El Consell busca evitar que Ciudad de la Luz devuelva toda la inversión
Johnson cree que prosperará el recurso contra la devolución de las ayudas exigida por Bruselas
La Generalitat Valenciana se verá obligada a vender las instalaciones de Ciudad de la Luz, no solo por su desastrosa situación económica, sino porque la obliga a ello la resolución de la Comisión Europea que dicta la devolución del total de la inversión realizada en los estudios cinematográficos de Alicante, 264 millones de euros, porque constituyeron ayudas públicas que vulneraban la libre competencia con estudios cinematográficos de carácter privado. Ciudad de la Luz, que es pública, tendrá que devolver esa cantidad a la Generalitat a través de la Sociedad de Proyectos Temáticos.
La consejera de Cultura, Turismo y Deporte, Lola Johnson, que se mostró muy irritada con la oposición, y especialmente con la diputada socialista Eva Martínez, por sus denuncias públicas sobre la gestión del complejo, defendió este miércoles en las Cortes Valencianas de nuevo la bondad de los grandes proyectos y de Ciudad de la Luz en concreto, aunque asumió que su situación “es complicada”. Para empezar, por la resolución de Bruselas, que es “ejecutiva”, aunque la Generalitat la ha recurrido.
Johson comparó la situación de Ciudad de la Luz con la de la factoría Ford de Almussafes, que también fue denunciada por recibir ayudas públicas y ganó el caso. El diputado de Esquerra Unida Lluís Torró le hizo ver que hay una diferencia clave por cuanto la Ford es una empresa privada y Ciudad de la Luz no. La consejera desgranó los motivos esgrimidos para recurrir la resolución de la Comisión Europea, entre ellos que “no se ha tenido en cuenta el retorno a la zona hotelera y de servicios”, es decir, los beneficios que ha creado el complejo. En este punto, Johnson, que llegó a afirmar que Bruselas había “abierto la puerta” a que prosperara el recurso, apuntó que, “en el supuesto de que haya que devolver las ayudas”, espera que no sea “el 100% de la inversión”.
También es “compleja”, en expresión de la consejera, la situación en que se encuentra la gestión de los estudios cinematográficos, ya que la empresa adjudicataria, Aguamarga, ha llevado a Ciudad de la Luz a los tribunales y no quiere dejar las instalaciones. Johnson reiteró que la Generalitat pondrá a la venta el complejo en un proceso en el que se valorará “la mejor oferta económica”. La “externalización del complejo”, que está en “una fase de adaptación a los requerimientos de la Comisión Europea”, afectará a todas las instalaciones (estudios y terrenos), y no sólo a una parte, como se había previsto en un principio.
Amparo Castellano, directora de la empresa Aguamarga, que mantiene un pleito con la Generalitat porque no le paga desde agosto de 2009, señaló horas después: "No se puede romper unilateralmente el contrato en un tema que está pendiente de los tribunales. Castellano consideró una nueva "coacción" el anuncio de la venta, informa Ezequiel Moltó. Johnson justificó en las Cortes la rescisión del contrato con Aguamarga por el fallecimiento del que fue su presidente, el cineasta Luis García Berlanga.
“Voy a seguir hablando de Ciudad de la Luz”, dijo, por su parte, la socialista Eva Martínez, que había solicitado la comparecencia de la consejera, “para que el Gobierno valenciano no siga despilfarrando el dinero de todos”. La diputada, que cifró en un millón de euros al mes las pérdidas del complejo, añadió: “Que la Ciudad de la Luz no tenía que haberse construido no lo digo yo; lo dice la resolución europea”.
Josep Maria Pañella, de Compromís, ironizó al apuntar que Ciudad de la Luz es “un proyecto tan rentable que quieren sacárselo de encima”. Torró, de Esquerra Unida, acusó al Consell de haber lanzado el proyecto sin un mínimo estudio del “coste de oportunidad”.
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