Los productores vacían una cisterna asturiana en la rotonda de Teixeiro

Los tres sindicatos agrarios, UU.AA.; XX.AA. y SLG, han destacado que la huelga de entrega de leche que comenzó en la medianoche de este martes transcurrió "sin ningún tipo de incidentes" y han asegurado que ningún camión recogió leche en las 11.000 explotaciones lácteas de Galicia. Pese a ello, sobre las 14 horas, representantes sindicales y productores pararon y vaciaron en la rotonda de Teixeiro una cisterna de la marca asturiana Reny Picot que circulaba llena de leche de la que los productores desconocen el origen ya que insisten en que ningún camión recogió en toda Galicia. La acción se desarrolló ante la ausencia de presencia policial.

Los portavoces de las centrales sindicales han subrayado, en rueda de prensa, que esperan que esta medida de presión pueda terminar "cuanto antes", entre este martes y el miércoles, pues la huelga de entrega supone, según han recalcado, "un suicidio económico" para los ganaderos. Unos 50 ganaderos se han dado cita  frente al Parlamento gallego, en la primera jornada del debate de investidura de Alberto Núñez Feijóo, para protestar por la "crisis" que atraviesa su sector y por que la leche de Galicia reciba "el precio más bajo" de la Unión Europea pese a ser la comunidad que más produce. Entre cánticos de "Feijóo escoita, o agro está en loita" -"Feijóo escucha, el agro está en lucha"- y con pancartas que reclamaban 'Precios justos para la leche' dentro de 'Un ámbito gallego de negociación', el portavoz de la Federación Rural Galega (Fruga), Elías Somoza, ha explicado a Europa Press que su demanda es percibir precios "suficientemente rentables" para sus productos

Y es que, como ha ejemplificado, los ganaderos gallegos reciben 29 céntimos por litro de leche, mientras que, en la vecina comunidad de Asturias, este coste se eleva hasta "los 33 o 34 céntimos".

Junto con ello, Somoza ha denunciado que son "varios" los ganaderos que "llevan tres y cuatro meses sin cobrar" debido al "fracaso estrepitoso" de la Xunta en la creación de la empresa Alimentos Lácteos, que ha definido como "un proyecto partidista" puesto en marcha la pasada legislatura.