Los peajes tensan la pugna abierta entre Bildu y el PNV

Bildu, la coalición gobernante en Gipuzkoa, y el PNV, el principal partido de la oposición, tienen abierta de par en par la veda de la confrontación política entre sí y están decididos a emprender una lucha sin cuartel por la supremacía nacionalista en este territorio después de que las urnas dejaran la pugna electoral en un empate técnico. La política de peajes, un asunto todavía irresuelto en Gipuzkoa, ha sido el último pretexto que ha conseguido recuperar la polémica entre ambas formaciones. La portavoz de la Diputación foral, Larraitz Ugarte, se encargó de reavivar la llama al convocar ayer a los medios informativos para despreciar la propuesta que hizo hace ahora dos meses el PNV de instalar un puesto de cobro en la N-I a la altura del puerto de Etxegarate.

Ugarte tachó de “demagógico” el planteamiento del PNV sobre el peaje de Etxegarate. Este partido acusó a comienzos de septiembre a la institución foral de dejar escapar 53 millones de euros al año por no aplicar un peaje en la N-I a los 10.000 camiones extranjeros que atraviesan Gipuzkoa a diario por esta vía. La diputada del ramo, acompañada por el director de Infraestructuras Viarias, Joseba Altube, presentó el último Informe sobre Intensidad de Tráfico 2011 para “desmontar” los datos del PNV y demostrar que su propuesta “no se sostiene en ningún dato riguroso, sino en meras hipótesis absolutamente irreales”.

No tardó el PNV en reaccionar a través de un comunicado en el que denunció la actitud “agresiva y prepotente” de la representante foral en su comparecencia. En esa misma nota, la juntera Aintzane Oiarbide le recordó a Ugarte que precisamente esa actitud “ha sido castigada por la sociedad guipuzcoana en las últimas elecciones autonómicas”. “No sabemos si Bildu ha recibido ese mensaje; lo que tenemos claro es que Larraitz Ugarte no lo ha hecho”, añadió.

La portavoz foral y Altube aseguraron que por Etxegarate pasaron 7.500 camiones al día en 2011, de los que unos 5.000 atravesaron toda la provincia y solo 1.800 eran foráneos. Con un peaje en este punto se podrían recaudar siete millones —13 millones si el cobro se amplía a turismos—, lo que según los representantes de la Diputación “perjudicaría claramente” a los camioneros guipuzcoanos y vascos, dado que la “mayoría” del tráfico de mercancías es de origen o destino local y no internacional.

Una vez desarmada la propuesta del PNV, Ugarte hizo un llamamiento a este partido a presentar una propuesta “más audaz” y se avenga a acuerdos en esta materia. El PNV acusó a la responsable de Infraestructuras Viarias de “seguir ocultando” su sistema de cobro para los camiones que atraviesen el territorio y de buscar “un enfrentamiento total” con los peneuvistas. La Diputación espera tener listo a comienzos de 2013 su plan de financiación de carreteras.

Por otro lado, la Hacienda guipuzcoana salió ayer al paso de unos datos ofrecidos por el viceconsejero de Transportes en funciones, Ernesto Gasco, sobre el impacto económico que está teniendo la construcción del AVE vasco, que fijó en 656 millones (el 40% por IVA e IRPF de los 1.642 millones adjudicados en Gipuzkoa). Esos datos “carecen de base”, aseguró el fisco en un comunicado. El Gobierno de Bildu indicó que solo por IVA el impacto ha sido “negativo” para Gipuzkoa en 13 millones.