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El pago de la deuda se come el presupuesto

El presupuesto consolidado suma 13.940 millones de euros, un 9% menos que el año pasado José Manuel Vela asegura que son "realistas y reponsables" y marcados por la "austeridad"

José Císcar y José Manuel Vela presentan los presupuestos de la Generalitat para 2013.
José Císcar y José Manuel Vela presentan los presupuestos de la Generalitat para 2013.jordi vicent

El pago de los intereses de la deuda se ha convertido en el capítulo de gasto más importante en los presupuestos de la Generalitat valenciana para 2013, tan solo por detrás del presupuesto que tendrán las consejerías de Sanidad y Educación.

La asfixia financiera es de tal calibre que el consejero de Hacienda, José Manuel Vela presentó ayer el proyecto de ley de Presupuestos de 2013 pendiente de la llegada del dinero del Fondo de Liquidez Autonómica para pagar las deudas más perentorias y mientras la compañía Gas Natural Fenosa cortaba el suministro eléctrico por impago a dos consejerías de la Generalitat.

En este contexto, el Consell se ha visto forzado a presentar unas cuentas que se llevan por delante la política de grandes eventos, pero también la gran mayoría de las inversiones y la generosa política de subvenciones que durante años alimentó una enorme red de asociaciones y colectivos que dependían casi en exclusiva de la Generalitat.

Y todo ello con el objetivo de generar liquidez para pagar los intereses de la deuda, cumplir con el objetivo de déficit del 0,7% del PIB fijado por el Gobierno y salvaguardar la prestación de los servicios básicos en sanidad, educación y bienestar. Todo ello enmarcado en un contexto de recesión económica, según los informes de los principales organismos financieros, que permite vaticinar a la Generalitat que el PIB se desplomará otro 0,6% el año próximo y la demanda interna caerá un 3% en la Comunidad Valenciana.

El dinero destinado a pagar créditos supera el de Bienestar Social

Vela presentó ayer para el ejercicio de 2013 un presupuesto de 12.784 millones, que es un 7,1% inferior al de este año. La caída todavía es mayor (9%) si se toma el presupuesto consolidado de la Generalitat, 13.940 millones de euros, que incluye las cuentas de las empresas. Un sector público al que se le aplica un nuevo recorte del 26% en sus cuentas.

Sanidad y Educación se llevan el grueso del gasto (71%), a pesar de que tendrán que apañarse con un 9,6% menos de dinero que este año.

Tras el gasto destinado a sanidad y educación, emerge el coste de la deuda, que consumirá 1.292 millones de euros y el 10,1% del presupuesto del año próximo. La obligación de atender las deudas supera con creces el presupuesto de la Consejería de Justicia y Bienestar Social (7,4% del gasto previsto) y se sitúa a años luz del resto de departamentos.

Respecto a las cuentas de 2012, el coste de la deuda en 2013 se duplica. Vela explicó que las razones de este crecimiento desmesurado están en la subida de tipos en los mercados financieros; en la conversión de deuda comercial en deuda financiera tras el plan de pago a proveedores arbitrado por el Gobierno; en el coste adicional que supondrá afrontar los préstamos del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA); y en la asunción por parte de la Generalitat de 4.023 millones de euros que antes figuraban en los balances de las empresas públicas.

Los ingresos siguen cayendo y tan solo se salvaguarda la inversión básica

Las consecuencias del espectacular aumento del coste de la deuda también obligan a sacrificar las inversiones, que se reducirán el año que viene un 42%. Ello explica por qué la Consejería de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente pierde un tercio (32,7%) del dinero que tiene este año. De tal modo que las inversiones se reducen, en la práctica, a pagar obra hecha, financiar obras de emergencia y mantenimiento de las infraestructuras ya en servicio.

La Consejería de Turismo, Cultura y Deporte es otra de las que sufren el hachazo (34,6% menos de presupuesto que este año). El departamento que dirige Lola Johnson explicó que los recortes se producen especialmente en la política de grandes eventos ya que en 2013 no se celebrará ni el Gran Premio de Europa de Fórmula 1 en Valencia, ni habrá regata de la Volvo Ocean Race, ni el Open de Golf que se celebra en Castellón.

No son las únicas politicas sacrificadas en la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte, porque también sufren importantes recortes las partidas destinadas a la cultura y a la promoción del valenciano.

Presidencia de la Generalitat, la Consejería de Agricultura y la Consejería de Economía, con menor presupuesto que las anteriores, también sufren el efecto de la tijera y ven recortada su capacidad de gasto entre el 22% y el 25%.

Y es que el capítulo de ingresos, que este año ha jugado una mala pasada al Consell, que hizo mal las previsiones, tampoco permitirá alegrías en 2013. Tras la subida del IVA aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy, el consumo cae y la recaudación también.

El consejero de Economía admitió que la previsión es que los ingresos por IVA se reduzcan en un 12,9% el año que viene, al pasar de 3.300 millones de este año a los 2.874 del ejercicio próximo. La previsión de ingresos por otros impuestos indirectos, como los que gravan el alcohol o el tabaco, cae en menor medida, de modo que la mengua final prevista es del 8,5%.

Con una economía todavía en recesión, la recaudación prevista por impuestos directos (IRPF) se reduce en un 7,8% respecto a lo consignado este año.

De hecho, los únicos hilos de los que tirará el Consell para mejorar sus ingresos son las tasas, que ya han registrado subidas importantes este año, sobre todo en las universidades. Además, otras tasas nuevas, como las judiciales, que se han introducido en el último trimestre del año serán efectivas durante todo el ejercicio. El Gobierno valenciano, además de revisar todos los precios públicos, también introduce ocho tasas nuevas, fundamentalmente por servicios de la Consejería de Infraestructuras, con las que prevé recaudar otros 3,2 millones adicionales. El resultado es que Vela ha previsto que como tasas y precios públicos ingresará cerca de 1.500 millones de euros, lo que supone un 9% más de lo previsto en 2012.

José Manuel Vela, que estuvo acompañado en la presentación de los presupuestos por el vicepresidente José Ciscar, asumió la previsible pérdida de ingresos el año que viene por la mala situación económica. Sin embargo, el consejero de Hacienda se volvió a quejar del actual sistema de financiación autonómica, que el año próximo disminuirá las transferencias del Estado por este concepto en 173 millones de euros.

Por contra, Vela se mostró optimista con la posibilidad de ingresar dinero por la venta de inmuebles de la Generalitat. Un concepto por el que presupuestó ingresos en 2011 y este año y por el que no ha recaudado nada. El consejero de Hacienda, que antes de fin de año sacará a subasta los edificios que albergan las consejerías de Economía y de Justicia y Agricultura, prevé recaudar 94 millones en 2013 por la venta de inmuebles y solares.

En conjunto, el presupuesto vuelve a los niveles de 2006, solo que en vez de invertir, pagamos la deuda.

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