El fiscal pide 11 años para el acusado de intentar acuchillar a su padre en Balaguer

Un fiscal de la Audiencia de Lleida ha solicitado este jueves una pena de 11 años de prisión para José F. H., un vecino de Balaguer (Lleida) acusado de intentar acuchillar a su padre durante una discusión ocurrida en el domicilio familiar porque su madre no le quiso dar dinero.

Los hechos ocurrieron el 20 de junio de 2011 cuando el acusado, de 40 años y con un ligero trastorno mental que no le afecta a su voluntad, discutió con sus padres porque la madre le dijo que no le daría dinero hasta que pagara los destrozos causados en el mobiliario durante una de las muchas broncas que protagonizó en la vivienda. En concreto, unos días antes había lanzado al suelo el televisor y la radio.

El ministerio fiscal, que ha mantenido la acusación por un delito de tentativa de homicidio y otro de lesiones, ha señalado que el procesado, ante la negativa de la madre de entregarle el dinero que solicitaba, cogió un cuchillo de cocina y arremetió contra su padre con intención de causarle la muerte. El fiscal ha añadió que el acusado empujó a su padre, lo tiró al suelo e intentó clavarle el cuchillo en el cuello, no llegando a conseguirlo por la intervención de la madre, que le arrebató el arma de las manos. La mujer sufrió una corte en la mano derecha de 5 centímetros de profundidad.

El acusado ha reconocido que discutió con su padre, ya fallecido, pero que en ningún momento tuvo intención de matarlo, sino simplemente de asustarlo. Y ha justificado la presencia del cuchillo en su mano porque estaba comiendo, un hecho que no ha quedado acreditado.

La madre se ha acogido al derecho de no declarar contra su hijo. En cambio, sí lo ha hecho un hermano, que ha definido al acusado como una persona agresiva que amenazaba constantemente tanto a sus padres como a sus hermanos. Éste también ha indicado que el clima de conflictividad en el domicilio familiar fue aumentando con el tiempo.

Después de ocurrir los hechos enjuiciados este jueves, los familiares del acusado expresaron su temor a que pueda cometer “una barbaridad” cuando salga de prisión, donde lleva un año y cuatro meses.