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Terrazas bajo las Cuatro Torres

El Consistorio quiere dinamizar una zona con poca oferta comercial y hostelera Los adjudicatarios del concurso deberán construir los quioscos permanentes

Elena G. Sevillano
Vista de la explanada donde se ubicarían las terrazas.
Vista de la explanada donde se ubicarían las terrazas.CRISTÓBAL MANUEL

No es tarea fácil tomarse un café en la zona de las Cuatro Torres. Impone subir al espectacular y no demasiado barato restaurante del hotel Eurostars, en la planta 30 del edificio PwC, donde la única opción es desayunar a lo grande, con bufé libre. La cafetería de la planta baja, a la que también se puede acceder sin estar hospedado pero que no tiene acceso directo desde la calle, es otra posibilidad; sin embargo, muchos transeúntes ni siquiera saben que está ahí. La zona de las Cuatro Torres, con esas moles de oficinas de más de 200 metros de altura, es una perfecta postal del Madrid más vanguardista, pero le falta vida: no hay comercio, no hay bares ni restaurantes. Uno solo va allí con un propósito: es inhóspita para el paseante.

Esa constatación, y seguramente también la necesidad de obtener ingresos, ha llevado al Ayuntamiento de Madrid a permitir la instalación de un restaurante y una cafetería, cada uno con su correspondiente terraza de veladores. El restaurante ocupará 163 metros cuadrados y podrá abrir en verano una terraza de 72. El bar, situado justo enfrente, tendrá 87 metros cuadrados y podrá sacar mesas y sillas en otros 70 metros. Se situarán entre la torre PwC y la Torre de Cristal. El Ayuntamiento acaba de publicar el concurso para construir y explotar los dos “quioscos permanentes de hostelería en las Cuatro Torres”, por los que espera obtener un canon mínimo anual de 59.000 euros en el caso del restaurante, y de 31.754 euros en el de la cafetería.

EL PAÍS

“Desde que se construyeron las torres se había hablado de las dos terrazas. Era una necesidad que tenía la zona”, afirma el concejal presidente del distrito de Fuencarral-El Pardo, José Antonio González de la Rosa. A los cánones anuales, los adjudicatarios deberán sumar la tasa que paga cualquier establecimiento por instalar una terraza en la vía pública. Si el restaurante, por ejemplo, decide ocupar los 72 metros cuadrados permitidos, deberá pagar además unos 7.800 euros al año. Eso si solo se trata de mesas y sillas; en caso de que instale un cerramiento estable, la tasa se incrementa un 50%. Pese a que, además, los adjudicatarios deberán construir los quioscos, lo que supone una fuerte inversión inicial, en el Distrito de Fuencarral aseguran que no han parado de recibir llamadas de empresarios interesándose por el concurso. “Va a tener muchos novios; un establecimiento bajo las Cuatro Torres, en una zona con tanto tránsito de gente, es un caramelo”, pronostica el concejal.

La concesión de los quioscos es a 40 años, algo que el Consistorio justifica por la inversión que deben hacer los adjudicatarios en la construcción. Los pliegos admiten además dos prórrogas de 10 años cada una. El Ayuntamiento asegura que tendrá muy en cuenta el diseño de los establecimientos, que deberá adecuarse al entorno “vanguardista y financiero” en el que se situarán. “No es cualquier zona de Madrid, así que tampoco se puede instalar cualquier chiringuito”, señala González de la Rosa. Los estudios previos que hizo el Consistorio fijaron en 82.000 y 44.000 los cánones con los que saldrían a concurso los dos quioscos, pero tras pasar por el interventor fiscal las cantidades se corrigieron y fueron las que se publicaron finalmente en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid el 9 de octubre pasado.

El concurso valora con un máximo de 35 puntos el proyecto de construcción e implantación de la actividad y con 65 puntos la oferta económica que mejore el canon inicial. Los pliegos son bastante específicos en cuanto a los requisitos que deben cumplir los establecimientos. Llegan a precisar qué tipo de letra (gotham rounded) deben tener los rótulos y prohíben “la utilización de materiales desechables como cubiertos de plástico o platos de cartón”, entre otras cosas. Los interesados en la adjudicación tienen de plazo hasta el 8 de noviembre próximo.

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Vía libre a los veladores

La nueva ordenanza que regulará la instalación de terrazas en la capital, aún un borrador, facilita los trámites y los requisitos a los hosteleros.

En 2011 se contabilizaron 4.100 terrazas, el doble que en 2009, lo que da una idea de la creciente extensión de los veladores gracias a la nueva política del Consistorio desde la aprobación de la Ley antitabaco.

Como novedad, la nueva ordenanza permitirá instalar terrazas a los locales de ocio nocturno. Se mantendrán los mismos horarios de cierre: en verano, a la 1.00 de domingo a jueves y a las 2.30 los viernes, sábados y víspera de festivos. El resto del año, a medianoche. La apertura pasa de 10.00 a 8.00. En el centro el cierre se adelantará entre media hora y una hora cuando se apruebe la zona de protección acústica.

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Sobre la firma

Elena G. Sevillano
Es corresponsal de EL PAÍS en Alemania. Antes se ocupó de la información judicial y económica y formó parte del equipo de Investigación. Como especialista en sanidad, siguió la crisis del coronavirus y coescribió el libro Estado de Alarma (Península, 2020). Es licenciada en Traducción y en Periodismo por la UPF y máster de Periodismo UAM/El País.

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