“Somos la comunidad que tendrá que hacer menos ajustes el próximo año”
"Yo pretendo gobernar para todos, populares, socialistas y nacionalistas. Yo no me presento contra nadie ni pensando en depender de un pacto" asegura el presidente
A Alberto Núñez Feijóo (Os Peares-Ourense, 1961) no parece que la haga demasiada gracia que la mayoría de las encuestas vaticinen que renovará su mayoría absoluta en el Parlamento gallego. El presidente de la Xunta y candidato del PP se muestra dolido porque se hayan puesto en duda las cuentas de su Gobierno e insiste en que esa sospecha no le daña a él sino a Galicia.
Pregunta. ¿Le perjudica o le beneficia que las encuestas le den vencedor?
Respuesta. Si nos las creemos, nos perjudica. Si nos vale para seguir trabajando, nos incentiva. Sabemos que tenemos dificultades, que debemos sacar mayoría absoluta y vencer a los desencantados con la crisis. Por eso somos muy prudentes y yo estaré hasta el último minuto de la campaña pensando que el partido está 0-0.
P. ¿En sus contactos estos días con los votantes ha notado la desconfianza hacia la política?
R. Lo que he notado es que nos miran con la esperanza de que hagamos política con mayúscula, que recuperemos la política de la Transición, que una cosa es discrepar y otra crispar, o intentar sacar réditos electorales de todo. Pero a la luz de las audiencias de los debates televisivos y de la asistencia a los actos, creo que la gente no ha perdido el interés.
P. ¿Cómo se ha tomado Rajoy su intento en distanciarse de él en esta campaña?
R. Hemos hecho lo mismo que en 2009, repartirnos los actos. Y como el partido tiene muchos dirigentes, el presidente del Gobierno ha estado en un sitio, yo en otro, la secretaria general en otro, y Gallardón y Esperanza Aguirre... Lo que no hemos hecho es como el PSOE, que ha tenido que venir Rubalcaba a tutelar al candidato socialista.
P. ¿Cómo ha visto la campaña y qué le ha molestado más?
R. Creo que ha habido bastante debate sobre los temas que interesan a la gente. Pero me ha molestado que se intentase perjudicar unos contratos de astilleros gallegos con una de las petroleras más importantes del mundo [la mexicana Pemex], que se haya intentado incomodar a esa empresa y poner en duda unos contratos que los astilleros conocen perfectamente. Y también que se haya puesto en duda el déficit público de la comunidad, cuando está perfectamente avalado por la contabilidad nacional; y se haya intentado impedir que Galicia coloque su deuda pública. Y todo eso solo para lograr réditos electorales. Me molesta que no se haya distinguido entre la lucha partidista legítima y el hacer daño a Galicia.
P. Las dudas sobre el déficit han surgido de un informe previo del Consello de Contas, el tribunal de cuentas autonómico, que apunta a que en 2010 se traspasaron irregularmente al ejercicio siguiente más de 400 millones de gasto. Y el autor de ese informe no es sospechoso, es José Antonio Orza, exconsejero de Fraga.
R. El déficit ha sido supervisado por la Intervención General del Estado y por el Ministerio de Hacienda de la socialista Elena Salgado. Cuando ese informe previo pase a ser un informe, ya me pronunciaré. Pero sobre el trabajo de los auditores del Consello de Contas no me voy a pronunciar. Lo importante es que yo me he despedido hoy [por ayer] enseñando las facturas de la comunidad y hemos pagado casi 1.500 millones de euros en dos meses. Y eso, por desgracia, ahora mismo es la excepción.
P. ¿Pero puede usted garantizar que no ha dejado gastos irregularmente de un año para otro?
R. Me reitero. Yo he hablado con el señor Orza y me ha dicho que ese informe no está aprobado y que eso es neutral desde el punto de vista del déficit público. Y yo añado: sobre el déficit ya se ha pronunciado quien tenía que hacerlo, la Intervención General del Estado. Y lo ha hecho con los criterios de la contabilidad nacional, que son distintos a los que se pueden emplear en una auditoría. El candidato del PSOE incluso ha dicho que en 2011 traspasamos otros 600 millones. Pues bien, la cuenta de ese año no está ni cerrada ni entregada al Consello de Contas. ¿Y sabe para qué lo ha hecho? Para hacer daño a sabiendas y que la comunidad autónoma no pudiese colocar 200 millones de deuda pública que teníamos en trámite con las entidades financieras. Han intentado boicotear la colocación de deuda pública, para obligarnos a acudir al fondo de rescate, y los contratos con Pemex para hacer barcos en Galicia. Eso lo ha intentado hacer el PSOE con el seguidismo del BNG.
P. Usted dice que hay que pasar de los ajustes al estímulo al crecimiento. ¿Dónde va a encontrar el margen para hacerlo?
R. Las comunidades están en pleno ajuste y algunas, por no hacer lo que tenían que haber hecho, hasta han convocado elecciones. A Galicia sus cuentas le permiten desviar alguna cantidad adicional para seguir con nuestra política de avales a empresas, 2.500 millones en los últimos cuatro años; seguir con las políticas de apoyo a la automoción, que han permitido construir 100.000 coches más en Galicia en el último año... Como tenemos las cuentas ordenadas, gastamos menos en los intereses de la deuda y eso lo podemos dedicar a estímulos al crecimiento. Y no hemos tenido que subir el IRPF y algunos impuestos más, como han hecho otras comunidades, lo que deja espacios para incrementar el consumo. Es la política que se puede hacer cuando se tiene un 1,5% de déficit público y no el doble o triple.
P. Pero si usted vuelve a gobernar, los presupuestos del próximo año incluirán nuevos recortes.
R. Incluirán el cumplimiento del objetivo de déficit, que será del 0,7%. Pero tendremos que bajar mucho menos que los que están en el 3,5% o el 4%. Por tanto, Galicia será la comunidad en la que haya que hacer menos ajustes en 2013. Nos hemos adelantado: no subimos las tasas universitarias, damos atención sanitaria a los emigrantes, no cobramos más del mínimo de ocho euros al mes a los pensionistas, como sí hacen otros; se construyen hospitales, hay más profesores por alumnos que la media... Hacemos cosas, no con la intensidad que nos gustaría, pero sí más que el resto.
P. A veces da la impresión de que usted se presenta como el mal menor...
R. Ja, ja... No sé cuál es el mal mayor. Lo que sí puedo decir es que yo pretendo gobernar para todos, populares, socialistas y nacionalistas. Yo no me presento contra nadie ni para hacer una coalición contra el que gane.
P. Imagine que tiene delante a un funcionario que ha sufrido recortes, a un pensionista que tiene que pagar por las medicinas y a un profesor interino que se ha quedado sin empleo. ¿Qué les diría para pedirles el voto?
R. Al funcionario, que nosotros no le hemos recortado sus retribuciones por encima de lo decidido por la Administración del Estado. Y que tenemos un compromiso con los empleados públicos y que vamos a hacer una oferta para que 6.000 contratados laborales puedan pasar a funcionarios. A los pensionistas, que el 40% de los gallegos no pagan un euro de medicamentos, y que hemos pedido un esfuerzo, en función de la renta, para que los parados sin prestación, que antes pagaban el 40%, ahora no paguen nada. Y que los cinco euros de media que pagan al mes los dedicamos a construir hospitales. Y en cuanto a los profesores, a mí me dicen que el número total no ha bajado. Además, seguiremos haciendo ofertas públicas de empleo.
P. Si gana, ¿qué error no repetirá?
R. Sin duda, explicar más y mejor, hasta la saciedad, todo el día. No dar por obvio cosas que nos parece que lo son. La gente tiene que conocer bien la situación en la que estamos.
P. ¿Si pierde seguirá como líder de la oposición?
R. Seguiría donde me pongan mis compañeros de partido. Ellos me pusieron aquí y ellos decidirían. Habrá un congreso después de las elecciones, yo daré cuentas, presentaré el balance y mis compañeros decidirían. Pero eso no me preocupa.
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