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Ciutat Vella censura una exposición y veta un ciclo de cine social

La muestra criticaba las redadas policiales contra inmigrantes

Camilo S. Baquero
Obra original
Obra originalJ.TOMÁS

El verano que termina no dejará buen sabor de boca en algunos movimientos sociales y culturales de Ciutat Vella. Dos episodios que algunas entidades califican de “censura” por parte de la regidora Mercè Homs (CiU) han marcado la vida asociativa del distrito. Homs ha silenciado el lema de una exposición porque era crítico con las redadas contra inmigrantes en el Forat de la Vegonya y ha vetado un ciclo de cine en el Raval por sus contenidos, también críticos con los excesos policiales.

Martín Habiague es el director de la Fundación Mescladís, una escuela de hostelería fundada en 2005 que funciona en el barrio de Santa Caterina. Muchos de sus alumnos son inmigrantes. A principios del verano, el director empezó a notar un incremento en las quejas de abusos de policías de paisano entre sus estudiantes. Khalid, uno de ellos, recuerda que fue interrogado por la policía incluso cuando vestía la camiseta de la escuela. “Dijeron que era un control habitual”, recuerda. La policía solo puede actuar de este modo con personas sospechosas de actitud delictiva.

Cambio realizado
Cambio realizadoJ.TOMÁS

Habiague decidió, en compañía de artistas como el fotógrafo Joan Tomás, realizar una intervención que denunciara las redadas. Así nació Escolta’m!, que, a manera de cómic, reúne las visiones de cinco jóvenes del barrio sobre el tema. El Casal del Barri del Pou de la Figuera dio el permiso para instalar la exposición. Uno de los paneles muestra a los jóvenes gritando “¡Stop redadas, stop racismo!”.

“El mismo día del montaje vinieron los técnicos municipales a decir que había un debate político en el distrito y pidieron que se quitara la palabra redada bajo la amenaza de desmontarlo todo”, recuerda el director del centro. La versión oficial es que “hubo quejas de los comerciantes de la zona sobre el mensaje y el distrito acordó con la entidad organizadora de la actividad que retirarían la palabra”, explicó una portavoz. El Ayuntamiento también criticó que en un equipamiento municipal se expusiera un mensaje crítico de estas características.

Aunque reconoce los problemas de seguridad del barrio, Habiague critica la labor policial. “Todos en el barrio sabemos quiénes son los delincuentes. ¿Cómo es posible que la policía no se entere?”, se pregunta. Los comerciantes, sin embargo, sostienen que las redadas son efectivas.

El veto a actividades incómodas también se extiende al Raval. El pasado miércoles, la Asamblea del Raval trató como punto del día la decisión de Homs de revocar el permiso para realizar las sesiones de cine al aire libre que se celebraban los jueves desde hace un año en la Rambla del Raval.

“Antes el permiso era anual, en julio nos dijeron que debía ser solicitado mensualmente y finalmente nos lo revocaron sin explicaciones. Dijeron que Homs solo nos podía atender hasta septiembre”, denuncia un portavoz de la asamblea. El Ayuntamiento declinó ayer explicar los motivos por los que ha vetado las exhibiciones.

El ciclo de cine presentaba películas de alto contenido social y reivindicativo, como Panther (1995), que cuenta la historia del movimiento de autodefensa negra surgido en la década de 1960 en EE. UU. Según el portavoz, varios técnicos del distrito les explicaron que el veto se debía a que también se presentaban cortos que mostraban escenas de represiones policiales en manifestaciones en Barcelona, algo que la asamblea admite: “Exhibimos material crítico con el statu quo”. Ahora están recogiendo firmas que validen que lo que hacen tine "interés cultural" para el barrio.

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Sobre la firma

Camilo S. Baquero
Reportero de la sección de Nacional, con la política catalana en el punto de mira. Antes de aterrizar en Barcelona había trabajado en diario El Tiempo (Bogotá). Estudió Comunicación Social - Periodismo en la Universidad de Antioquia y es exalumno de la Escuela UAM-EL PAÍS.

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