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Maroto pide un cara a cara con López para exigir el canon de capitalidad

El alcalde de Vitoria, “molesto” porque López, vizcaíno, ocupe el primer puesto de las listas del PSE por Álava

El alcalde de Vitoria, Javier Maroto, anunció ayer que ha solicitado una reunión cara a cara con el lehendakari, Patxi López, para conocer cuáles son las razones por las que Vitoria no ha recibido aún los casi cinco millones de euros reservados en el presupuesto del Gobierno vasco por el concepto de canon de capitalidad, que por primera vez recogen las cuentas como consecuencia del extinto pacto PP-PSE. “Alguno va a dejar la silla y se va a ir sin firmar”, alertó.

Maroto apostó por realizar este anuncio —y por felicitarse del que parece que será el cierre de la central nuclear de Garoña, a favor del que se ha posicionado, en contra de la línea oficial de su partido— en su primera comparecencia pública después de que se conociera que será segundo en las listas del PP por Álava para las elecciones al Parlamento vasco. Alcalde y parlamentario, aseguró, para defender los intereses de una ciudad sobre la que hasta ahora ha habido un “ninguneo histórico” en la Cámara y en el Gobierno vasco.

La reunión que reclama a López no es “exclusivamente una necesidad en lo económico”, reconoció, sino un interés porque el lehendakari deje “constancia” de que “cree que Vitoria es la capital” de Euskadi. En un discurso marcadamente electoral, en el que apeló con insistencia al vitorianismo, Maroto se reconoció, a preguntas de los periodistas, que está “molesto” por el hecho de que López, vizcaíno, ocupe el primer puesto de las listas del PSE por Álava. “Ni es de Vitoria, ni ha querido a Vitoria”, censuró.

Cuerda como defensa

Maroto llegó ante los medios con un ejemplo para defender que compaginará cargos: el del exalcalde de la ciudad, José Ángel Cuerda, un referente en una ciudad desencantada con su clase política, que también fue parlamentario y alcalde al mismo tiempo. Una compatibilidad que el anteproyecto de ley de incompatibilidades, que no será aprobado, prohibía que regidores de municipios de más de 50.000 habitantes fueran parlamentarios.

Maroto explicó que no participará en comisiones y ponencias a menos que tengan relación con Vitoria, aseguró que “puedo pasar un rato en el Parlamento como paso una tarde en Zaramaga para hablar con los vecinos”. También pedirá cambios de agenda en el Consistorio e insistió en que terminará la legislatura como parlamentario.

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