López pide seguir gobernando para que la paz no tenga “marcha atrás”

El lehendakari y candidato socialista a la reelección, Patxi López, insistió ayer en su idea de “ganar” las próximas elecciones autonómicas del 21-O porque, según proclamó en un acto de su partido, ayer en Bilbao, “hacen falta cuatro años más de gobierno socialista para que el nuevo tiempo que hemos abierto no tenga marcha atrás”. Defendió la necesidad de que el PSE-EE siga al frente del Ejecutivo para lograr consolidar el proceso de paz y “el pasado de enfrentamiento y división ya nunca pueda volver”.

El secretario general de los socialistas vascos intervino en el Comité Nacional del PSE-EE antes de que este órgano aprobase después, con solo tres abstenciones de sus 200 integrantes, las listas con las que esta formación concurrirá el próximo 21-0, lideradas por el propio López en Álava, José Antonio Pastor en Bizkaia e Iñaki Arriola en Gipuzkoa.

El mandatario socialista quiere prolongar su estancia en Ajuria Enea, según dijo, para rematar su reforma de los servicios públicos, continuar apoyando a la economía productiva y defender “el autogobierno estatutario dentro de España y de Europa”. En esta cuestión, alertó de la pretensión del PP de “pasar por encima” del autogobierno para “imponer sus recortes” y de un PNV que “sigue en sus trece con propuestas independentistas que solo conducen a la división y el enfrentamiento”.

“No vamos a abandonar a nadie a su suerte”, será la proclama electoral de los socialistas. Pese a que en todas las encuestas el PSE-EE no sale muy bien parado, López se mostró convencido de que ganará las elecciones, porque su partido representa “el único proyecto que defiende una Euskadi solidaria, moderna y competitiva”, que “atiende a todos” los ciudadanos “sin dar la espalda a sus problemas reales”.

“Tengo que decirle a Urkullu que yo no estoy obsesionado con él”

El candidato del PSE-EE aprovechó para retar de nuevo al presidente del PNV, Iñigo Urkullu, aspirante también a ser lehendakari, a aceptar un cara a cara para “aclarar y contrastar” las propuestas de ambos. Le emplazó a demostrar con datos, “no con soflamas”, que Euskadi está en quiebra y a explicar sus “dudas sobre la limpieza de las elecciones”. “Tengo que decirle al señor Urkullu que yo no estoy, ni mucho menos, obsesionado con él, que no me quita el sueño”, dijo entre aplausos en respuesta a su contrincante, quien recientemente dijo que el lehendakari está obsesionado con él. “Urkullu sí que está demostrando una obsesión casi patológica con los socialistas, a los que nos ha pretendido deslegitimar desde el mismo día que llegamos al Gobierno, porque siguen sin entender que el Gobierno no es patrimonio suyo”.

También se mostró muy crítico con el Gobierno de Rajoy, a quien censuró su “fracaso” en el “viaje solitario de los recortes”, porque “hoy estamos peor que hace ocho meses” y “ni siquiera sabemos adónde vamos”. Frente al modelo de los populares, López expuso que en Euskadi “no cerramos escuelas ni hospitales”, “no recortamos en educación”, “no aplicamos copagos ni otro tipo de recortes”. A su juicio, los socialistas han logrado demostrar que “se puede ser austero, se pueden cumplir los compromisos del déficit” sin dañar los servicios públicos.

El lehendakari aprovechó su intervención para volver a defender la “necesidad” de abordar una reforma fiscal en Euskadi que iguale la presión impositiva con la existente en los países más avanzados de Europa, dado que de esa forma “el Gobierno vasco tendría un 25% más de presupuesto”, en torno a los 2.000 millones de euros, según sus cálculos.

En la parte final de su discurso incidió en que la legislatura que acaba de cerrarse ha sido “con diferencia” la que ha tenido “más actividad parlamentaria, más control al Gobierno y más legislación”.

Y en alusión a las listas con las que los socialistas concurren a los comicios, López admitió que “no están todos los que son, porque no hay sitio para todos, pero sí que son todos los que están”. A todos sus correligionarios les recordó que Euskadi celebrará “la primera campaña en libertad, sin amenazas de muerte”, por lo que les animó a que la libertad “recuperada” sea “un acicate” para recorrer todos los pueblos, calles y plazas. “Levantad la mirada porque durante cuatro años hemos cambiado Euskadi y ahora nos toca conquistar el futuro”.