Caos en el transporte escolar por la improvisación de la consejería
Centenares de niños de urbanizaciones valencianas se quedan sin ir al colegio el primer día Educación retrasa las listas de becarios de transporte
Las cifras no siempre miden el tamaño de los recortes, pero las consecuencias de estos sí son visibles. El cambio en los criterios de todas las ayudas sociales de la Consejería de Educación —en el comedor y transporte, en los libros escolares— provocó ayer un caos en el día del inicio del curso 2012-2013, en el que miles de alumnos que viven en urbanizaciones y municipios de la Comunidad Valenciana se quedaron sin asistir a clase por el retraso en la difusión de los listados de los beneficiarios. “Los autobuses llegaban y se iban vacíos”, aseguraron padres de alumnos de las poblaciones de Náquera, Chiva, Pobla de Farnals, en la provincia de Valencia. En Alicante, el problema se agravó por la reducción de líneas en localidades como L’Alfàs del Pi, El Campello o Elche.
La Consejería de Educación explicó a EL PAÍS que “con carácter general las rutas están publicadas desde el mes junio” y aseguró que los problemas fueron “puntuales”. No obstante, reconoció que “en una quincena de municipios, por razones orográficas, las rutas se terminaron de ajustar hace una semana, como en Polop, Xeraco o La Patacona (Alboraia)”.
En un primera estimación, la Confederación de Padres de Alicante calcula que la reducción de becas de transporte escolar reducirá el número de beneficiarios un 75% respecto el curso anterior. Con los cambios, por primera vez las becas de transporte ya no van asociadas a las de comedor, sino que se limitan a cumplir con la legislación que obliga a transportar a los alumnos cuyo domicilio familiar esté a 3 kilómetros del colegio.
Por otra parte, FAPA-Valencia denunció que el recorte en las ayudas para financiar los libros de texto de Primaria y ESO se reduce de 42 a 29 millones, 13 menos que el año pasado.
Los autobuses escolares se van vacíos
La Plataforma en Defensa de l’Ensenyament Públic, que leyó un Manifiesto contra los recortes en el colegio público Malva-rosa de Valencia, valoró el inicio de curso como “el de los recortes más graves para la educación pública”. El presidente Alberto Fabra, de visita en un colegio de Quatretonda, anunció que el próximo curso se implantará el polémico “distrito escolar único”.
Miles de niños de 6 a 12 años que viven en urbanizaciones y municipios se quedaron ayer en tierra, sin ir al colegio, porque el autobús no tenían los listados con la autorización de beca de la Consejería de Educación. “En Náquera, los tres autobuses han llegado y se han ido vacíos ante la falta de listados”, confirmó el AMPA del único colegio público que hay.
En las urbanizaciones de Chiva (Valencia) ocurrió lo mismo. “La consejería no ha dado aún la autorización para que los niños de Infantil subieran al autobús y se han quedado sin colegio. Solo han subido los de Primaria”, denunció Lola Villanueva, madre afectada por la descoordinación administrativa.
El cambio de criterio
En Chiva, donde más de 90 escolares que deberían de tener el transporte escolar público y gratuito autorizado por la Consejería de Educación, ya que la distancia entre las urbanizaciones y los tres colegios públicos llega a ser de entre 12 kilómetros y 20, la situación ha sido aún más contradictoria. Los alumnos de Primaria tenían autorización para ser transportados, pero los de Infantil no.
“Las familias con dos o más hermanos se han quedado con un niño abajo, sin ir al colegio, y otro arriba del autobús”, describe esta madre. “Esto es un problema porque los padres, como yo, que entramos a trabajar antes de las nueve de la mañana no podemos llevar a los niños al colegio. Es un caos”, concluye.
En Náquera, no tenían el listado de niños con beca de transporte escolar
En Náquera, también en la provincia de Valencia, “los autobuses escolares han circulado, pero vacíos”, según explica el AMPA porque “no tenían los listados de los alumnos que tenían que recoger”.
El problema, según el AMPA, es que “la consejería no ha resuelto aún el listado de las becas de transporte. Como ayer los padres no teníamos información oficial de nada, algunos han optado hoy por llevarlos en coche”.
La Consejería de Educación insiste en que la programación de rutas está cerrada desde junio y los directores informados. También aclara que la orden del 18 de junio, recoge la normativa estatal, por la que la Administración garantiza el transporte a los alumnos de las etapas obligatorias. “Sólo si sobran plazas se transporta a los de Infantil, Bachillerato o FP”, precisan fuentes oficiales, que insisten en que “los 130 inspectores de educación realizaron los controles del inicio de curso y de nueve incidencias, solo reportaron dos relacionadas con el transporte escolar”.
En Chiva, el bus sólo
La vigilancia oficial choca con la realidad, sobre todo, en la provincia de Alicante, donde las capitales comarcales sufrieron verdaderas escenas de caos. “Hay un profundo malestar por las restricciones a las ayudas para el transporte”, aseguró el presidente de la FAPA Gonçal Zaragozà. La confederación recibió un alud de quejar de familias afectadas sobre todo de las pedanías de Orihuela, Elche, Torrevieja, Alicante y La Vila Joiosa. Por ejemplo en la pedanía de las Bayas de Elche el año pasado había 70 escolares con derecho a transporte público, y este curso solo 17.
La federación de Ampas de Alicante ha iniciado una recogida de firmas para exigir a la consejería que restablezca el servicio de autobús para los alumnos. “Estas restricciones son un ataque a la igualdad de oportunidades y alejan a las familias de la conciliación de la vida familiar y laboral”, aseguró el presidente de la FAPA.
Ginés Pérez, director del colegio Fabraquer en El Campello de Alicante, y portavoz de la permanente de directores en la provincia, estaba desbordado por las circunstancias y las quejas del transporte. “La consejería ha cambiado el criterio y ahora solo recogen a los alumnos que vivan a 3 kilómetros en línea recta del centro educativo, y eso ha dejado a muchos fuera”, admitió Pérez, quien por ejemplo dijo que en su colegio el año pasado iban cada día cinco autocares y ayer solo llenaron uno y medio.
Los alumnos más perjudicados fueron los que tienen alguna discapacidad y que acuden a aulas de educación especial. En el colegio Enric Valor de Alicante había varias madres indignadas. “Todo va en contra nuestra, mi hija va en silla de ruedas y necesita del transporte”, dijo Patricia, madre de una niña de siete años con una discapacidad del 75% porque sufre distrofia muscular.
La vuelta al cole de los 1.378 alumnos de infantil y primaria en L’Alfàs del Pi llegó con la eliminación de tres líneas de transporte escolar, una decisión adoptada por consejería sin previo aviso algo que ha despertado indignación entre los afectados, según informaron fuentes municipales.
En Elche tampoco se recogieron a los niños que estuvieron en paradas dentro de un radio superior a tres kilómetros al centro educativo, muchos alumnos del colegio público San Antonio de Padua no tienen derecho al servicio de transporte, según ha denunciado UPyD.
Primera protesta del curso
Esta ola de recortes en las becas de transporte y de comedor provocó también lo que la Plataforma Per l’Ensenyament Públic definió como “la primera protesta del curso”. Decenas de personas desplegaron en las puertas del colegio público Malva-rosa de Valencia, con más de 50 años de historia, una pancarta que decían “Per l’educación pública” y “Más calidad, más valenciano, más dignidad”. Allí, los padres y madres del barrio fueron dejando a los niños en el centro mientras apoyaban las movilizaciones de profesores y sindicatos. “Los niños no tienen culpa de nada”, explicaba Laura Font, directora del colegio. “Aquí nos han quitado al auxiliar de inglés y a un maestro de compensatoria”, continuó, “pero seguimos haciendo extraescolares para que los alumnos lo noten lo menos posible”. ¿Cómo? “Trabajando más y cobrando menos”. “Hay que seguir luchando con huelgas o protestas para sensibilizar a este gobierno de este atropello”, afirmó Juan Moscardó, un padre de dos alumnos de 4º y 6º.
En el colegio Alfonso Iniesta de Banyeres de Mariola, los padres decidieron ocupar las aulas con sus hijos para “comprobar en persona la masificación que sufrirán este año por los recortes”. La Plataforma en Defensa de la Escuela Pública de Alicante acudió al colegio Mediterráneo, en la playa de San Juan, donde estaba el concejal de Educación del PP en Alicante, Antonio Aldid, al que le recriminaron que “no dé la cara y explique los motivos del retraso del Majón Cervantes, que lleva cuatro años en barracones y sin expectativas de cambio”.
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