Madrid incumplirá en siete décimas el déficit previsto para 2012

La Comunidad de Madrid incumplirá el objetivo de déficit marcado por el Gobierno central para 2012, del -1,5 % en relación al PIB, y cerrará el ejercicio contable con siete décimas de desviación (-2,2 %), según los datos del tercer Observatorio Fiscal y Financiero de las Comunidades Autónomos de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea). Este estudio calcula que el déficit de Madrid llegaría al -2,6 % del PIB si no se ejecutasen las medidas de reducción de gastos recogidas en el Plan Económico-Financiero presentado por el ejecutivo regional esta primavera en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF).

Estas medidas de contención supondrán en el caso de Madrid una rebaja en un 0,4 % del déficit público regional en relación al PIB. No obstante, el observatorio señala que, de acuerdo con los datos  de ejecución presupuestaria del primer trimestre de 2012, la Comunidad de Madrid ha ejecutado tan solo un 6 % de la reducción anual prevista en gastos de personal. La ejecución debería haber sido del 25 % en los tres primeros meses del año, incide el informe, para cubrir al término del ejercicio, con un 25 % en cada trimestre, el 100 % de la rebaja anual comprometida. El estudio de Fedea anticipa además que Madrid no elevará los ingresos según la previsión de su Plan Económico-Financiero, tras comparar estos datos con la subida interanual en la recaudación entre enero y marzo reflejada en las cifras de ejecución presupuestaria de ese periodo.Según el estudio de Fedea, los ajustes en contabilidad nacional presentados no son creíbles, por lo que la fundación augura que solo las comunidades de Galicia, Navarra y La Rioja cumplirán los objetivos, mientras que Castilla-La Mancha y Cataluña serán las autonomías que previsiblemente más se desvíen.

De acuerdo con las conclusiones del informe, las comunidades autónomas representan hoy la "principal amenaza" para que el Estado pueda cumplir el objetivo del déficit en 2012. El documento, dirigido por los profesores José Ignacio Conde-Ruiz y Juan José Rubio Ramírez, sitúa a las autonomías como "el mayor factor de riesgo" y entiende que "el cumplimiento de los  objetivos fijados por el Gobierno para las comunidades se tornan más que complicados en un escenario macroeconómico adverso de plena recesión económica". Según las estimaciones realizadas por los autores, en el caso de que las comunidades implementasen íntegramente las medidas anunciadas en sus PEF (Planes Económicos y Financieros), el déficit estimado para este año se situaría en el -2,2 por ciento del PIB, lo que supondría una desviación del 0,7 por ciento respecto al valor esperado.