Teatro de calle con sabor francés

Durante toda la Aste Nagusia, las plazas de Arriaga y del Gas están marcadas como los escenarios de distintas obras de teatro de calle. Ambos lugares cobraron ayer un marcado acento francés, con las actuaciones de Les Krilati y Cie. Extreme, respectivamente. Los segundos, además, coparán hoy ambos escenarios en las tres sesiones previstas. Sin embargo, apenas se escuchó la lengua francesa, al tratarse de representaciones basadas en la mímica y las acrobacias y sin apenas diálogos

A la una y media de la tarde, en torno a 400 personas —y otras tantas a las 21.15—, se acercaron a los aledaños del Teatro Arriaga para observar las acrobacias de Les Krilati en Fando comme Lis. Una historia de un enamoramiento en una estación de tren, contada en clave de humor en un espectáculo de mimo y trapecismo, que en la primera sesión no solo reunió a mayores, sino también a un buen puñado de niños.

Antes de comenzar esa primera representación, la organización avisaba a los espectadores de la necesidad de refrescarse y protegerse del sol ante el intenso calor que hacía en el Arenal. A pesar de las altas temperaturas, más y más gente se quedaba a ver la representación una vez comenzada, por la espectacularidad del montaje y de los movimientos de los actores.

El decorado de aire industrial, incluía un trozo de vía de tren y una estructura de hierro de más de diez metros en la que Rocco Le Flem y Caroline Simeon trepaban, se descolgaban y balanceaban mientras se desarrollaba la historia. Los murmullos de admiración de los allí presentes se mezclaron con la incredulidad de los más pequeños a cada nueva acrobacia de los intérpretes.

Los montajes tienen principalmente un carácter mímico y acrobático

Por la tarde, en la Plaza del Gas tuvo lugar una nueva entrega del ciclo de teatro callejero infantil, en la que los también franceses Cie. Extreme representaron Dunk. Cuatro locos baloncestistas, sorprendieron a niños y mayores con distintas acrobacias, torpezas y burlas entre ellos en torno a una canasta. Varios centenares de chavales apiñados en torno a una improvisada cancha de baloncesto aplaudieron cada una de las canastas de los actores, a cada cual más inverosímil, mientras los padres no podían reprimir una sonrisa con el humor fresco de la compañía francesa.

Este mismo grupo actuará hoy para niños y mayores, y será el encargado de llenar ambas plazas. Será un duro día de trabajo para los Cie. Extreme, cuyas obras van en la línea de un teatro gestual, mímico y acrobático, sin casi diálogos. Poco después de mediodía repetirán Dunk en el Arriaga, y a las 21.15, representarán Cascade Academy, también delante del teatro. En ella se cuenta la historia de unos acróbatas que son contratados a última hora para realizar las escenas peligrosas del rodaje de una película de piratas.

Por la tarde, en la plaza del Gas, interpretarán para los más pequeños Flying Brothers, la historia de dos hermanos muy diferentes en casi todo excepto en su agilidad. Malabares, monociclos y círculos de fuego prometen volver a impresionar y provocar gritos y risas.