Gipuzkoa se vuelca en apoyo de la puesta en libertad de Uribetxeberria

“La Diputación no contempla otro escenario que no sea su puesta en libertad en cumplimiento estricto de la legalidad vigente”. La portavoz de la institución foral, Larraitz Ugarte, de Bildu, volvió a exigir ayer la liberación del etarra Josu Uribetxeberria, interno en el Hospital Donostia y desde la medianoche del miércoles en huelga de hambre. Primero acudió a la concentración convocada por Herrira a las puertas del centro hospitalario, luego compareció en una rueda de prensa para confirmar que el diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, recibirá hoy a los familiares del preso, enfermo de cáncer terminal.

Uribetxeberrria, detenido en 1987, cumple condena por tres asesinatos y por los secuestros del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara y el empresario Julio Iglesias Zamora.

En la cita de hoy Garitano, como aseguró su portavoz, mostrará su “solidaridad y disposición a tomar parte en aquellos actos que planteen la liberación inmediata de Josu Uribetxeberria”. El ofrecimiento llega apenas un día después de que Garitano acudiera por primera vez a un homenaje concreto a una víctima de ETA, el del empresario guipuzcoano Joxe Mari Korta. El mandatario no quiso hacer ningún comentario entonces “por respeto a la familia”.

“En manos del PP está en este momento concreto acabar con el sufrimiento de los presos políticos vascos, de los que 14 se encuentran gravemente enfermos. Está en sus manos la excarcelación del preso Josu Uribetxebarria para que pueda morir dignamente”, subrayó la portavoz de la Diputación de Gipuzkoa.

A la concentración de Herrira, presidida por 14 sillas vacías con el nombre de los etarras gravemente enfermos, según la organización, acudió además una nutrida representación de la izquierda abertzale con Pernando Barrena, Txelui Moreno y Joseba Permach al frente. También asistieron miembros de los partidos que conforman Amaiur. Todos exigieron la liberación inmediata del etarra. Barrena achacó “la alta tasa de morbilidad” entre el colectivo de presos de ETA a “la política penitenciaria, el aislamiento, los traslados constantes, la presión, el estrés, la mala alimentación y la falta de atención médica”.

“Las puertas de la solución al conflicto están totalmente abiertas mientras el estado mantiene su actitud de cerrar las ventanas a la oportunidad de paz”, destacó Iñaki Irazabalbeitia, miembro de Aralar.