Los trabajadores municipales de Jerez bloquean el pleno por el ERE

Jerez ha vivido este viernes otra jornada convulsa. Se agota el periodo de consultas para que se haga efectivo el ERE del Ayuntamiento y la presión social aumenta en la calle. Decenas de trabajadores afectados por los despidos colectivos y representantes sindicales han logrado bloquear la gestión municipal. A las nueve de la mañana arrancaba en el Consistorio la celebración de un pleno ordinario que la alcaldesa María José García Pelayo (PP) terminaba por suspender seis horas más tarde sin celebrarse debate alguno.

El ruido de las bocinas ha hecho inaudible la sesión. En los primeros compases las protestas de los trabajadores han sido intermitentes. El PSOE había presentado una iniciativa urgente para debatir sobre el primero de los ERE que se tramita en la administración jerezana y los sindicatos aguardaban a comprobar si el gobierno local ignoraba el resto del orden del día para centrarse en el asunto más delicado que sufre la ciudad: el despido de 450 empleados en dos expedientes que se pretenden aprobar en agosto. La palabra ERE no sería nombrada por el gobierno hasta agotar el orden del día previsto, así que los afectados por el expediente agitaron las bocinas de manera indefinida.

Durante más de cinco horas, los megáfonos, los pitos, las cacerolas, los palés de metal no han parado de sonar. El estruendo hacía inviable el debate y Pelayo ni ha suspendido el pleno ni lo ha trasladado a otro salón más alejado de la calle. La alcaldesa popular ha optado por esperar, con aparente tranquilidad, el cese de la protesta.

La alcaldesa ha optado por suspender la sesión tras seis horas de espera

Pasadas las tres y cuarto de la tarde, los empleados concentrados a las puertas del pleno han sido  relevados por otros trabajadores que habían finiquitado la jornada laboral; los sindicatos han empezado a reclutar personal incluso para aguantar la noche; y la alcaldesa, que había comunicado su intención de esperar lo que hiciera falta para agotar el orden del día y debatir el punto adicional propuesto por el PSOE, ha terminado por levantar la sesión. “Más de seis horas de espera son suficientes”, ha afirmado.

Desde que se anunció hace más de una semana la lista de los 300 primeros afectados por el ERE del Ayuntamiento el ambiente se ha enrarecido por días en Jerez. Los seleccionados siguen sin conocer los motivos por los que se les ha escogido. La oposición habla de “persecución sindical y política” y advierte de “las consecuencias legales que puede sufrir el gobierno por la falta de objetividad en la elaboración de la lista negra”. Los socialistas dicen que particulares ya preparan querellas individuales contra la alcaldesa y concejales; y el partido que lidera el exalcalde Pedro Pacheco, Foro Ciudadano, prepara una demanda por prevaricación contra Pelayo y su junta de gobierno.

En la página 48 de la memoria del expediente entregada a los sindicatos se implica a personal técnico en la toma de decisión del personal afectado por los despidos.

Tampoco gusta ni a sindicatos ni a oposición que la alcaldesa haya delegado en una consultora privada, Deloitte, la tramitación del ERE. Los agentes sociales creen que es el gobierno “el que debe dar la cara y negociar” y han decidido plantar al gabinete jurídico en las dos primeras reuniones. El lunes se ha convocado un tercer encuentro de los seis programados antes de que se entreguen las cartas de despidos y Pelayo, tras la sonora protesta en el pleno, anuncia que habrá presencia del gobierno en la sesión.