FLA

Por el vicepresidente Diego Valderas nos enteramos de que la Junta de Andalucía descarta acogerse al Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) aprobado por el Gobierno de la nación en el Consejo de Ministros del día 13. Asegura que, de momento, nuestra comunidad cuenta con un endeudamiento sensiblemente inferior al de otras por lo que tiene camino por delante antes que acogerse a un mecanismo que, por su alto grado de intervencionismo, señala, supone toda una agresión a nuestro Estatuto de Autonomía.

Sin embargo, en otros territorios, como en Valencia, han optado por ser los primeros en acogerse a esta medida restando importancia al hecho de que, a cambio de la inyección de liquidez que van a tener gracias a este fondo, van ser sometidos a una severa intervención y seguimiento por parte de la Administración central.

En su afán de restar cualquier carga antiautonómica de dicho rescate, los populares lo comparan con la creación del sistema que se estableció para el pago a proveedores de los Ayuntamientos, obviando que este recurso ha supuesto la obligatoriedad de adoptar los Consistorios durísimos planes de ajustes así como un notable estrechamiento en el margen de maniobra de las instituciones locales. Con todo, no resultan extrañas estas valoraciones si se tiene en cuenta que proceden de aquellos a los que el Estado de las Autonomías les viene grande hasta el punto de proponer la devolución de competencias al Estado.

Esta semana, Griñán tendrá oportunidad de explicarle a Rajoy, en el esperado encuentro de La Moncloa, sus tesis en favor de la colaboración y la cooperación con el Gobierno central para luchar con más eficacia contra la crisis eludiendo cualquier confrontación pero con el máximo respeto al actual modelo de organización territorial. Y si se tienen que hacer modificaciones que sean a través del consenso y el diálogo con todos, precisa el presidente andaluz. Un discurso de mano tendida que para nada se creen en el seno del Ejecutivo central. Y es que está por ver el resultado de este encuentro ya que viene precedido de graves encontronazos entre ambas administraciones lo que hace dibujar un escenario crispado y marcado por una reedición del cerco a Andalucía que ya puso en marcha en su día Aznar, con nefastos resultados para sus intereses partidarios.

Habrá que esperar a la evolución de los acontecimientos, o lo que es lo mismo, a la capacidad que pueda tener la Junta en los próximos días para obtener por su cuenta los fondos necesarios, vía crédito con las entidades financieras o por medio de anticipos de tesorería del Estado. Hasta diciembre, que es la fecha límite para acogerse al FLA, hay tiempo para comprobar si Andalucía aguanta sin respiración asistida y sin ser intervenida.