El castillo de las puestas de sol

El castillo de Sancti Petri, en un islote diplomáticamente situado entre Chiclana y San Fernando, en plena bahía de Cádiz, recupera actividad este verano. Tras su reciente rehabilitación, que todavía luce en sus paredes blancas, amplía las posibilidades de este espacio cargado de historia. Donde muchos sitúan el templo de Melkart, se podrán saborear las esencias gastronómicas de Cádiz gracias a Ángel León, el llamado chef del mar. El cocinero ofrecerá sus platos en tres veladas de ensueño. Habrá danza y música para acompañar las puestas de sol y una exposición permanente con sabor a sal.

El castillo sirve perfectamente como metáfora de la historia de Cádiz. Por él pasaron todas las civilizaciones. Incluso se cree que aquí estuvo el templo religioso de Gadir. Sufrió ataques en diferentes guerras y ha sobrevivido al abandono de las administraciones. Ha sido hasta objeto de combate judicial entre ciudades, San Fernando y Chiclana, que se disputaban su titularidad, en una batalla resuelta en la práctica con acuerdo pacífico. Y, ahora, tras un ambicioso proyecto de rehabilitación acometido por el Ministerio de Medio Ambiente, reluce en la bahía de Cádiz con nuevas actividades bajo el amparo del parque natural.

Es la Junta de Andalucía la que ha cedido la gestión del islote a dos empresas, Loggia, encargada de las actividades, y Novojet, responsable de los viajes. De momento, ha resuelto esta concesión por un año pero espera otorgar permisos más prolongados para cimentar la programación del castillo. El año pasado ya hubo alguna muestra en sus recién estrenadas salas y este verano se refuerza la programación con un apuesta que mezcla el medio ambiente, la gastronomía y las esencias gaditanas.

Ángel León, que ha convertido las algas y el placton en musas de sus recetas de su restaurante Aponiente, en El Puerto de Santa María, desplazará su visión de la cocina hasta la fortaleza. “Hemos querido mezclar la idea de la estrella Michelin que Ángel tiene con las miles de estrellas que se ven desde Sancti Petri. Por eso hemos llamado a esta actividad Astro y gastro”, explica Francisco Toledo, de Loggia.

La idea es que tres días de este verano, 28 de julio, 25 de agosto y 21 de septiembre, los visitantes al castillo sean también comensales de un menú preparado por el chef. La aventura marítima y gastronómica tiene un precio de 150 euros por persona.

También habrá otras opciones más asequibles aunque menos suculentas para el estómago. Cada martes, miércoles, jueves y domingo del verano se organizarán puestas de sol ambientadas con música. Los barcos de Novojet saldrán antes del atardecer desde Chiclana y San Fernando para despedir el sol con canciones y danza. El precio por día y viaje parte de los 17 euros.

La visita al castillo incluye también un viaje por las salinas de la bahía de Cádiz gracias a una exposición que ocupa el interior de la fortaleza. La muestra ensalza esta actividad artesanal y recuerda que hace 200 años, cuando el islote sufría las bombas de los franceses, la bahía de Cádiz llegó a tener 147 salinas que se mantuvieron hasta bien entrado el siglo XX.

Es por esto que los responsables de Loggia defienden que el castillo sabe este año más a Cádiz que nunca. Los concesionarios quieren que todos los productos que se consuman en el islote de Sancti Petri provengan de la provincia, desde sus vinos, sus pescados hasta su sal.