El Ejecutivo orientará de forma individual a 92.000 desempleados

Lucha frontal contra el desempleo. En plena época de austeridad y gastos públicos mínimos, el Ejecutivo vasco invertirá 18 millones, —11 en Lanbide y siete más en contratos externos— en orientar y facilitar itinerarios formativos a los desempleados del País Vasco.

Este año serán 92.000 los demandantes de empleo que recibirán atención personalizada en base al nuevo sistema que estará plenamente operativo a partir del verano, y que pone a disposición de los parados una doble red de orientación.

Más de 220 expertos de Lanbide darán su primer diagnóstico al desempleado, y si su caso requiere de un especialista —menores de 30 años, desempleados de larga duración, personas en riesgo de exclusión social, discapacitados o reclusos en régimen abierto—, los especialistas de Lanbide lo remitirán a una red de “centros concertados” especializados para intentar mejorar su empleabilidad.

El sistema, que se aplica por vez primera en España, según la consejera de Empleo y Asuntos Sociales, Gemma Zabaleta, “tiene una cierta similitud en su funcionamiento con el sistema sanitario”, explicó de forma gráfica. “Atención primaria en primera instancia y especialistas después, si son requeridos”, precisó la consejera que rechazó de manera frontal que se tratara de una privatización de la red especializada. “Son centros contratados y coordinados por Lanbide y utilizarán sus conocimientos para ayudar al parado pero bajo las consignas del sector público”, indicó Zabaleta, que estuvo acompañada por el viceconsejero de Empleo, Javier Ruiz, y del director de Activación Laboral de Lanbide, Mariano Cortés.

Los perceptores

Para los perceptores de ayudas públicas, salvo los jubilados que están exentos, la orientación personalizada y los itinerarios que los especialistas propongan serán de obligado cumplimiento. “Nadie que lleva demasiado tiempo sin trabajo está por gusto, hay que poner los medios para que salgan del sistema”, señaló la consejera evitando hablar de obligatoriedad.

Sin embargo, la ayuda profesional para los más de 43.000 perceptores de RGI es uno de los proyectos “más ambiciosos” de Lanbide.

Durante el primer trimestre de 2012, la plantilla de orientadores profesionales de Lanbide ha iniciado el asesoramiento a un total de 6.804 perceptores.

Este mes de mayo arranca la segunda fase de orientación, con un plan de choque que se traducirá en el asesoramiento de otros 27.612 beneficiarios de esta prestación hasta el 31 de diciembre, lo que supone el 79% del total. En enero de 2013 se iniciará la tercera y definitiva fase de este programa, que culminará en el segundo trimestre con la orientación del 100%.

La orientación personalizada se basa en tres pasos básicos: inscripción de la demanda de empleo, diagnóstico de empleabilidad (análisis de las competencias, recorrido, formación y motivación laborales del demandante) y definición de un itinerario de inserción laboral (conjunto de actuaciones marcada por el orientador que cada demandante precisa para mejorar las carencias de su perfil laboral).

Por territorios, el 56,29% de las asistencias corresponderá a residentes en Bizkaia, un 28,38% a Gipuzkoa y el restante 15,33% a Alava.