Las editoriales tragan saliva

No corren buenos tiempos para las letras. El último estudio del Gremio de Editores de Euskadi, relativo a 2010, señala que las 110 empresas editoriales privadas radicadas en Euskadi publicaron ese año un total de 3.588 títulos, un 2,8% menos que en 2009. Los ejemplares editados en dicho periodo superan los 6,9 millones, lo que se traduce en una reducción del 8,8% en relación al ejercicio anterior y del 2,3% en el último lustro. La tirada media ascendió a 1.925 ejemplares por título.

En euskera las reducciones se distribuyeron de forma distinta. Se editaron un 5,5% títulos menos que en 2009 —1.476— y hubo un total de 3,2 millones de ejemplares publicados en euskera —un 5,3% menos que hace tres años—. El año 2008 fue el punto de inflexión que, tras años de incrementos, dio paso a la cuesta abajo. La facturación por la venta de libros en Euskadi fue de 67, 6 millones en 2010, un 8,5% menos que el año anterior. “El año 2011 ha sido duro en el mundo del libro, duro para todos y crítico para muchos. Libro somos editores, distribuidores, gráficos y libreros, muchos de ellos anteriores a la crisis, aunque esta haya agravado la situación. Algunos sectores han sufrido especialmente su dureza, pero sobre todo su permanencia en el tiempo”, señala Josu Leguina, presidente del Gremio de Editores de Euskadi, quien calcula para este ejercicio “una caída general del sector” de entre el 15% y el 40%.

La tarta de la producción editorial en el País Vasco se reparte entre la literatura infantil y juvenil (22%), los textos no universitarios —ESO, Bachillerato, FP— (29,3%) y las publicaciones sobre Ciencias Sociales y Humanidades (19,2%). Los títulos editados en formato digital fueron 2.388 y la facturación por la venta de estos libros ascendió en 2010 a 393.439 euros. El estudio no recoge datos de años anteriores relativos a esta categoría.

La actividad exportadora a América y Europa “ha aguantado el tirón”, según Leguina, y las expectativas son halagüeñas.

Las tres capitales organizan actos para celebrar el Día del Libro

Otro dato positivo es el que aporta el coordinador de las Ferias del Libro en Euskadi, Asier Muniategi, quien resalta que cada vez se observa un mayor volumen de producción editorial por parte de la gente joven, que, además, posee un público “fiel”. Muniategi destacó que el nivel creativo también está en alza y asegura que en Euskadi la crisis no ha afectado tanto al sector como en otros puntos de España.

Ayer abundaron los actos y ferias con motivo del Día Internacional del Libro en las tres provincias. Así, por ejemplo, en Bilbao, los editores y libreros de Bizkaia recordaron al escritor y periodista bilbaíno Ángel Ortiz Alfau al cumplirse el décimo aniversario de su fallecimiento.

Ortiz Alfau, también exconcejal socialista en la capital capital vizcaína, crítico literario y fundador y director del periódico municipal Bilbao, falleció el 4 de abril de 2002 con 78 años. Fue presidente de la Asociación de Amigos de Unamuno, además de un apasionado de los libros, la literatura y de Bilbao, según señaló en su homenaje la concejal de Cultura, Ibone Bengoetxea.

Cerca de 30 librerías sacaron a la calle sus existencias con un 10% de descuento y los organizadores entregaron una placa conmemorativa a Luis Ortiz, hijo del homenajeado. Sin salir de Bizkaia, las celebraciones en torno a esta fiesta cultural se han prolongado durante 10 días en Barakaldo.

La programación por el Día del Libro se ha extendido toda la segunda quincena de este mes en San Sebastián, con tertulias literarias, lecturas de cuentos y presentaciones de títulos, junto a actos relacionados con el bicentenario del nacimiento de Charles Dickens (1812-1870).

La red de bibliotecas Municipales de Vitoria conmemora esta fecha con un amplio programa de actividades que concluye el viernes e incluye cuentacuentos y talleres infantiles.

EL PAÍS organizó ayer un exitoso Bookcrossing en todas las ciudades donde tiene delegación.