Montoro rechaza la condición de CiU para apoyar los Presupuestos

Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, instó ayer a CiU a que actúe con “responsabilidad” con el Gobierno y retire la enmienda a la totalidad a los Presupuestos. El ruego cayó en saco roto porque los nacionalistas sostienen que las cuentas son “desleales” con Cataluña al no incluir los 219 millones de euros de la disposición adicional tercera del Estatuto para infraestructuras correspondiente a 2009. Josep Antoni Duran Lleida, portavoz de CiU, lamentó que Montoro pida una adhesión y condicionó su apoyo a esa suma “irrenunciable”: “Que busquen el dinero donde sea”.

La exclusión de la cifra amenaza con erosionar gravemente las relaciones entre convergentes y populares. Los nacionalistas se sienten maltratados por el PP pese a que han apoyado la reforma laboral o la subida de impuestos. El distanciamiento se plasmó en la reunión que Montoro y el consejero de Economía de la Generalitat, Andreu Mas-Colell mantuvieron en el hotel de Barcelona donde horas antes se había reunido la junta directiva del PP catalán. La cita se había pactado horas antes pero no dio resultados. Montoro aspira a que las cuentas sean aprobadas por una amplia mayoría para lanzar un mensaje contundente a los mercados y a los socios comunitarios. Pero Mas-Colell le transmitió que los 219 millones son una línea roja que no piensa cruzar. Y que tampoco renuncia a los 759 correspondientes a 2008 que le dejó a deber el Gobierno de Zapatero. El consejero estaba dispuesto a cobrar esa partida a plazos, e iba a servir para mitigar el déficit al tratarse de obra pública ya ejecutada. Las diferencias fueron más allá. Mas-Colell avisó al ministro de que las medidas para ahorrar 10.000 millones en sanidad y educación son insuficientes. La Generalitat cree que en su caso los recortes en salud han tocado techo y se debe actuar por la vía de los ingresos con el copago.

Montoro se escudó en la insuficiencia de fondos en la Administración central para pagar los 219 millones y Mas-Colell le contestó que los Presupuestos revelan las prioridades de un gobierno. Duran Lleida ya deslizó que no hay dinero para Cataluña —la caída de la inversión el del 50%— pero si para obras del AVE de otras comunidades.

Antes de la cita, Montoro animó a CiU a no obsesionarse con el gasto. “No cuestionamos la validez de la cláusula pero no hay más dinero. ¿Es tan difícil de entender?”, se preguntó. El ministro recordó a CiU que el Gobierno ya ayuda a las comunidades con liquidez para abonar las facturas impagadas de proveedores (1984 millones en Cataluña).

El mensaje no es gratuito: el préstamo está condicionado a que el Gobierno apruebe con antelación el plan de reequilibrio que las comunidades deben presentar el día 30 para cumplir un déficit del 1,5%. Montoro les instó a ajustarse al 1,5% bajo riesgo de intervención. El procedimiento es equiparable al que se sigue en la Unión Europea y recordó que está recogido en la Ley de Estabilidad Presupuestaria que CiU votó a favor.