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Reyval quiere abrir la incineradora de L’Alcora en 2013

La empresa defiende la tramitación del proyecto, que ha durado cinco años, y apunta: "Si hay dudas sobre ello tendrán que ser los tribunales los que lo digan”

Vecinos de L'Alcora y del entorno durante la marcha de protesta entre el pueblo y la empresa que proyecta la incineradora, en diciembre pasado.
Vecinos de L'Alcora y del entorno durante la marcha de protesta entre el pueblo y la empresa que proyecta la incineradora, en diciembre pasado.ÀNGEL SÁNCHEZ

El gerente de Reyval Ambient, la empresa que proyecta construir una incineradora de residuos industriales en la localidad castellonense de L’Alcora, Daniel Latorre, anunció ayer que prevén tener operativa la planta en menos de un año y medio. Según explicó, ya han solicitado la licencia de obras, pero desde el Consistorio recuerdan que, según el Plan General de Ordenación Urbana, “la normativa municipal no contempla incineradoras en el suelo urbano”. El gerente de Reyval Ambient apuntó que en 2006 obtuvieron la compatibilidad urbanística y acusó a la alcaldesa popular Merche Mallol de “estar rozando una presunta prevaricación”.

El proyecto ha motivado una fuerte movilización social en la comarca que se traducirá hoy en un nuevo episodio con la presentación en Valencia de un contencioso-administrativo contra el Consell por autorizar la planta. El Ayuntamiento esgrime que el proyecto que se sometió a información pública en 2006 no es el mismo que finalmente se aprobó. El primero pedía autorización para quemar 87.000 toneladas de residuos al año y se han autorizado 133.800. De hecho, existe un informe del Consell en el que se insta a la empresa a reiniciar todo el proceso de exposición al estimar que se trataba de una modificación sustancial. Algo que no se hizo. “Serán los tribunales los que decidan si se acepta que fue o no una modificación sustancial al proyecto, en todo caso se debería mantener la previsión inicial”, dijo el gerente.

Según Latorre, el anexo de 2009 no era un nuevo proyecto sino “una aclaración” y justificó el aumento de la capacidad de la incineradora al largo proceso de aprobación. No obstante, reconoce que las 133.000 toneladas de residuos autorizadas “es demasiado” y ha planteado la posibilidad de operar solo al 40% de lo permitido para acabar con el conflicto generado. Desde el Ayuntamiento negaron ayer cualquier intento de negociación que no pase por “renunciar a la incineradora”.

El gerente de Reyval Ambient defendió la tramitación del proyecto de la incineradora, que ha durado cinco años, y apuntó que “si hay dudas sobre ello tendrán que ser los tribunales los que lo digan”.

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