Madrid lanza un plan de 10 millones anuales para crear empleo

Acuciado por el descenso de ingresos derivado de la recesión económica (la segunda en menos de tres años), la descomunal deuda heredada de las inversiones aún sin pagar de los tiempos de bonanza, y la perspectiva de duras imposiciones en los Presupuestos Generales del Estado que se conocerán a finales de marzo, el Ayuntamiento de Madrid ha llevado a cabo un riguroso ajuste del gasto que ha adelgazado “ya casi hasta lo imposible” el dinero disponible para mantener en funcionamiento la ciudad.

Sin embargo, “pese a que se cumplirán los objetivos” de austeridad impuestos y autoimpuestos, el Gobierno local (PP) “no se va desentender de las empresas”, es decir, de las que hayan “sobrevivido” al huracán económico y financiero. Con este fin ha diseñado un plan a largo plazo, de aquí a final de legislatura (mayo de 2015), dotado con 43,5 millones de euros y ajustado ya al último tijeretazo aprobado en enero (equivalente al 7,25% del gasto total en bienes y servicios de 2012), que se anunció como provisional pero ya se computa como definitivo.

Con las 105 medidas presentadas hoy con estas palabras por el concejal de Economía, Pedro Calvo, y “gracias al cambio de Gobierno” y a las iniciativas puestas a su vez en marcha por su presidente, Mariano Rajoy (PP), entre las que el edil ha mencionado expresamente la reciente reforma laboral, el Ayuntamiento considera que puede ser “lo suficientemente optimista como para seguir creyendo en que es posible mantener el compromiso [electoral de fomentar antes de 2015 la creación] de 150.000 nuevos puestos de trabajo en la capital.

El plan estratégico publicitado esta mañana es el tercero desde la creación de la agencia Madrid Emprende, en 2005, y el segundo planteado para hacer frente a la crisis, tras el del periodo 2008-2011. En la actualidad, la agencia cuenta con 61 empleados y un presupuesto cercano a los 10 millones de euros. Diseñado para cuatro años (2012-2015) con el objetivo declarado de “impulsar la recuperación”, el proyecto conocido hoy parece buscar más bien, a tenor de las palabras de Calvo durante su presentación, apuntalar lo que ha quedado en pie tras el huracán y mitigar la magnitud de la tragedia: “Las empresas que han sobrevivido a estos tres años se pueden considerar ya como consolidadas; nos hemos centrado en atender a las que siguen vivas”.

¿Cuál es el balance del anterior plan, el que debía “combatir la crisis” entre los años 2008 y 2011? Se ejecutó en un 96% (contemplaba 75 medidas, 44 de ellas de “prioridad máxima”), quedando en el limbo sólo la creación de un parque científico (una iniciativa catalogada como del máximo nivel); de foros anuales con empresas de Londres, Nueva York y Tokio; y de un plan de ayudas para la internacionalización de empresas madrileñas. El responsable de este plan era el ahora vicealcalde, Miguel Ángel Villanueva. En sus cuatro años de vigencia, el Producto Interior Bruto de la ciudad cayó un 0,6% (frente al 2,2% de media nacional).

El Gobierno municipal prevé que la economía madrileña crezca en el entorno del 1% al menos 2013, un ritmo excesivamente bajo como para que se cree empleo, menos aún los 150.000 puestos prometidos por el Partido Popular antes de las elecciones municipales del pasado mes de mayo. Además, el plan reconoce que “los fuertes ajustes en los presupuestos públicos retrasarán la incipiente recuperación que se inició en 2010”. El único sector que ofrece perspectivas halagüeñas es el turismo, “nuestro petróleo”, según Pedro Calvo, que ha afirmado que se obtienen mayores ingresos de esta actividad que los que sacan del hidrocarburo algunos miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).

Los datos sobre empleo parecen contradecir también el optimismo mostrado por el Ayuntamiento. Según el informe, en esos cuatro años de vigencia del anterior plan y a fecha de balance de octubre de 2011, la afiliación a la Seguridad Social cayó un 9,3% (frente al 8,9% del conjunto del país), y el paro registrado aumentó un 111,1% (frente al 112,9% de media nacional). El desempleo medido por la Encuesta de Población Activa (EPA) pasó del 5,4% en el tercer trimestre de 2007 al 16,3% en el tercer trimestre de 2011, mientras en el conjunto del país subió del 8% al 21,5% en el mismo periodo. Es decir, en la capital creció 10,9 puntos, y en España 13,5 puntos.

Sin embargo, como ha reconocido hoy Pedro Calvo, ese diferencial positivo se está estrechando en los últimos meses. De hecho, ya hay distritos (Villaverde, Vallecas Villa o Villa de Vallecas) en los que la tasa de desempleo es superior que la media nacional, y la brecha de desigualdad entre barrios alcanza los 11,5 puntos. El pasado mes de junio, tras las elecciones, había 218.000 parados en la ciudad. Enero se cerró con 17.000 más.

Con estos mimbres y previsiones, el área de Economía y Empleo que dirige Pedro Calvo ha planteado un plan con cerca de 10 millones de presupuesto en 2012 y el compromiso de incrementar esa dotación un 5% de media anual hasta 2015, lo que sumaría, según sus previsiones, un total de 43,5 millones. El proyecto presentado hoy no desgrana la dotación paricular de cada una de las 105 medidas reseñadas, pero la parte del león corresponderá, entre otras, a dos de ellas que ya habían sido presentadas con anterioridad: el reintegro del 50% de la cuota de autónomos durante los primeros 18 meses a los emprendedores menores de 30 años (que costará 10 millones de euros hasta 2015) y la implantación de un fondo de capital semilla para financiar proyectos empresariales (el Ayuntamiento aportará un millón al año, y espera convencer a la iniciativa privada para sumar otro tanto, de forma que ayude a medio centenar de proyectos a razón de 160.000 euros de media).

Las bonificaciones en la cuota de autónomos debían beneficiar a cerca de 6.000 jóvenes empresarios, pero el Gobierno municipal se plantea ahora ampliar la edad máxima hasta los 35 años ante la falta de demanda (debida quizá al desconocimiento de las ayudas).

Entre las 105 medidas anunciadas hoy (que según Calvo cuentan con el apoyo consensuado de la oposición, los agentes sociales, y de 61 entidades públicas y privadas ligadas al tejido empresarial), se incluye también otra ya anunciada en repetidas ocasiones: la creación de zonas francas en las que las nuevas empresas o comercios de carácter creativo allí asentadas (“no vale, por ejemplo, con vender ropa; además, hay que haberla diseñado”) se beneficien de exenciones en el pago de algunos impuestos (tasa de basuras, construcción, vehículos, vados, etcétera). No está incluido en cualquier caso el Impuesto de Bienes Inmuebles, el principal instrumento recaudatorio del Ayuntamiento de Madrid.

En principio hay tres áreas en proyecto, en la Latina, barrio de Las Letras y Chueca, aunque sólo una de ellas estará lista para entrar en vigor en el primer semestre del año. El Ayuntamiento se ha negado a desvelar de cuál se trata. La exención estará en vigor durante dos años para los autónomos y pequeñas y medianas empresas que establezcan nuevos negocios en esas zonas relacionados con artes escénicas y visuales, patrimonio cultural, cine, radio y televisión, videojuegos, medios de comunicación digitales, música, libros, prensa, arquitectura, diseño, moda o publicidad.

El Ayuntamiento también se ha comprometido a fomentar la oficina de arraigo para empresas en proceso de reestructuración; la intermediación con bancos, cajas, fondos y otros inversores para la financiación de proyectos; la red de factorías industriales para albergar empresas con un fuerte componente de investigación más desarrollo (“ya funciona una, queremos crear dos más si hay disponibilidad presupuestaria”); la inversión en polígonos; y el Madrid International Lab, “un centro para atraer empresas extranjeras que ya está en marcha en la calle Bailén y cuenta con una veintena”.