Emakunde descarta de forma definitiva la nueva ley que preparaba Interior

Emakunde descarta definitivamente relanzar la ley de violencia machista. La directora del Instituto Vasco de la Mujer, María Silvestre, considera “sensata” la decisión adoptada recientemente por Interior de suspender el proyecto legal por falta de consenso. Silvestre, cuyo instituto depende directamente de Lehendakaritza, ha dejado claro esta mañana que la paralización de la tramitación de la Ley de Atención y Recuperación Integral de las Víctimas de la Violencia contra las Mujeres no tiene vuelta atrás esta legislatura. “No vamos a tener otra ley como esta”, ha confirmado en una entrevista en Radio Euskadi. Interior, departamento del que depende la Dirección de Atención a las Víctimas de la Violencia de Género, impulsora del anteproyecto cuestionado, argumentó la suspensión de la tramitación por la falta de acuerdo político y social en torno al mismo.

Silvestre ha calificado este texto como una “ley complicada” y ha valorado como un “ejercicio de sensatez” el paso atrás que ha dado el Ejecutivo vasco en esta materia. De esta manera, ha señalado que Emakunde ha tendido la mano en distintas ocasiones para debatir en torno a la ley de Igualdad de 2005, que en sus artículos 50 a 62 recoge las medidas relacionadas con la violencia sexista. En definitiva, se trabajará en profundizar en esta ley “más que crear una ley paralela”.

“Se corría el riesgo, luego se solucionó, de establecer dos vías paralelas para trabajar la violencia de género”, ha añadido. Esta es una de las principales críticas que recibió el borrador del anteproyecto, que dejaba en manos de Interior buena parte de las competencias en materia de violencia contra la mujer, restándoselas a Emakunde. El cambio planteado se interpretaba como un intento de modificar la filosofía de actuación, vinculando el maltrato al ámbito más policial y alejándolo de los trabajos en torno a la igualdad. Ello supondría una modificación sustancial, ya que asociaciones, expertos y grupos políticos siempre han identificado la violencia machista como una consecuencia de la desigualdad entre mujeres y hombres.

Dos detenidos

En este sentido, y preguntada por el incremento de escoltas que protegen a las víctimas en riesgo especial, Silvestre ha señalado que esta es “una medida más, pero no es la medida”. “Uno de los riesgos [de la violencia sexista] es la doble o la triple victimización” de las mujeres, ha explicado, para después apuntar a la posibilidad de que surja en las afectadas una “dependencia malsana con la persona que va a ejercer esa protección”.

Con todo, Silvestre ha abogado por incrementar las medidas que incidan en los agresores y no en sus víctimas.

Mientras, unos 700 ertzainas recibirán formación sobre las características socioculturales de colectivos procedentes del Africa Negra, Europa del Este, Latinoamérica y Magreb con el fin de mejorar su actuación en los casos de violencia machista contra mujeres inmigrantes. La mencionada dirección de Interior y los responsables de Inmigración del Gobierno han puesto en marcha estos cursos, que comenzarán mañana y se desarrollarán hasta el 29 de junio. En total se han organizado 58 sesiones de trabajo de cuatro horas de duración cada una para 29 grupos de agentes, que se ofrecerán en los centros de Iurreta y Erandio.

La violencia contra la mujer sigue sumando casos. Dos hombres han sido detenidos por la Ertzaintza en las últimas horas por sendas acusaciones de maltrato. El primer caso se produjo sobre las 4.30 de ayer en Irún, donde un varón de 24 años fue detenido por la Ertzaintza acusado de agredir a su pareja y a dos ciudadanos que intentaron evitarlo.

Horas después, un hombre de 53 años era arrestado en Vitoria tras golpear a su compañera sentimental, a la que arrastró hacia una ventana bajo la amenaza de tirarla por ella.