_
_
_
_
La punta de la lengua
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Cayó la mundial

La mayoría de los ejemplos de esta expresión conducen a relacionarla con algo peyorativo, en consonancia con su posible origen

Lluvia en Barcelona, en la Avenida Parallel el martes 4 de noviembre por la mañana.
Lluvia en Barcelona, en la Avenida Parallel el martes 4 de noviembre por la mañana.Gianluca Battista
Álex Grijelmo

Se ha oído mucho durante estos días: “Está cayendo la mundial”. Interesante formación expresiva a partir de un adjetivo que en el diccionario académico recibe hoy por hoy significados ajenos a lo que se pretende expresar con tal locución. La entrada de “mundial” recoge estas tres acepciones: “Perteneciente o relativo a todo el mundo”. “Perteneciente o relativo al mundo humano”. “Campeonato en que pueden participar todas las naciones del mundo”.

“Está cayendo la mundial” aparece a menudo en conversaciones de la lengua oral y familiar; o por escrito en WhatsApp y en los mensajes de Twitter/X. Pero también Ana Rosa Quintana pronunciaba esa locución el miércoles 30 de octubre en Tele 5: “¿Qué hacía la gente yendo a trabajar cuando está cayendo la mundial?”. O al día siguiente: “Estábamos preparando el programa y dijimos ‘hay que hacer el programa de esto. Hay que hacer todo el programa porque se va a liar la mundial”.

Muchos medios han reproducido (yo lo he visto en el Diario de Burgos del jueves 31) el testimonio de un agricultor valenciano, Juanvi Palleter, que había alertado en TikTok el viernes anterior, 25 de octubre, de que los radares de la Aemet en Valencia no funcionaban: “La gente no va a estar informada. Si hay víctimas vamos a pedir responsabilidades (…). ¿Cuando caiga la mundial que están anunciando, qué va a pasar?”.

Bueno, algo funcionaría bien en la Aemet si el día 25 ya se anunciaba la mundial que caería el 29 sobre las provincias de Valencia y Albacete.

El banco de datos académico muestra el primer registro de esta locución en 1989, dentro de una crónica taurina de Abc: “Y pidamos todos a Dios que en un momento de esos no salga un día un torero con una femoral rota, porque entonces sí que se podría liar lo que los castizos llaman ‘la mundial”. Y el segundo, de 2004, en un texto de Julián Lago publicado en La Razón: “Así que piensen por un momento la mundial que se le montaría al gobierno si, en el entretanto, la posguerra [de Irak] se cobra otra víctima española más”.

¿De dónde viene esta locución? El corpus académico del español del siglo XXI (Corpes), que incorpora muchos registros orales y coloquiales, ofrece 14 casos de “formarse [o montarse, o liarse, o armarse] la mundial”. Esos verbos tan reiterados nos hacen pensar en una originaria elisión del término “guerra”, que se sobreentendía: “se montó la [guerra] mundial”. Y podemos conjeturar que, una vez estabilizada la locución, se adentró por el idioma para abarcar nuevos ámbitos y significar la gran magnitud de cualquier otro asunto.

La mayoría de los ejemplos hallados por aquí y por allá conducen a relacionar “la mundial” con algo peyorativo, en consonancia quizá con el posible origen bélico de tal formación. Sin embargo, la expresión neológica no solamente aparece en contextos negativos o catastróficos. Otra crónica taurina, de 2004 en El Mundo, cuenta que “Morante montó la mundial” con una gran actuación. Unos apartamentos turísticos de Málaga se llaman La Mundial, sin que en su momento pudiera tener eso ninguna relación con la catástrofe de estos días. Y La Mundial es igualmente el nombre de una banda valenciana que anima las verbenas españolas, o tal vez mundiales.

Sea como fuere, el hallazgo es eficaz y expresivo. Quizá con el tiempo siga creciendo su aplicación a hechos agradables, más que a catástrofes.

Ojalá en la siguiente ocasión digamos tras un diluvio que “el sistema de protección civil ha sido la mundial”.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Álex Grijelmo
Doctor en Periodismo, y PADE (dirección de empresas) por el IESE. Estuvo vinculado a los equipos directivos de EL PAÍS y Prisa desde 1983 hasta 2022, excepto cuando presidió Efe (2004-2012), etapa en la que creó la Fundéu. Ha publicado una docena de libros sobre lenguaje y comunicación. En 2019 recibió el premio Castilla y León de Humanidades
Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_