La UE busca apoyo de países árabes para la fuerza de paz

La Unión Europea desea lograr un mayor consenso con los países árabes antes de decidir el envío de una fuerza internacional de estabilización al Líbano. La UE se ha hecho eco de las reticencias de algunos países árabes que interpretan que, en las condiciones actuales, una fuerza internacional equivaldría a una operación al servicio de los intereses de Israel, según fuentes comunitarias.

La realidad es que la propuesta de enviar una fuerza internacional a Líbano lanzada por los líderes del G 8 en San Petersburgo está todavía muy verde. La UE considera que previamente hay que alcanzar un alto el fuego. Sin embargo, Israel y Estados Unidos "exigen algo más que un alto el fuego clásico, consideran que el cese de hostilidades sólo puede alcanzarse después de haber debilitado a Hezbolá", según una fuente próxima al Consejo.

En busca del consenso necesario para el despliegue de la fuerza internacional y con el objetivo prioritario de facilitar un alto el fuego, Javier Solana, alto representante de la UE para la Política Exterior y Seguridad Común, salió ayer de nuevo de viaje hacia la región, donde se entrevistará con el primer ministro israelí, Ehud Olmert. Posteriormente, Solana, que cuenta con el pleno respaldo de los Veinticinco y está en contacto permanente con representantes de todas partes, se entrevistará con Mahmud Abbas, presidente de la Autoridad Palestina, y el presidente de Egipto, Hosni Mubarak.

Solana se reunió ayer en Bruselas con el secretario general de la ONU, Kofi Annan, quien manifestó en una conferencia de prensa que "es urgente que la comunidad internacional adopte soluciones y acciones concretas específicas", y no sólo realice declaraciones. Annan propondrá en los próximos días al Consejo de Seguridad la creación de la fuerza internacional.