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Un informe oficial acusa a Kohl de desviar fondos a la organización democristiana en su ciudad natal

El suplicio para el excanciller alemán Helmut Kohl, envuelto en un escándalo de donaciones ilegales, y para su partido, la Unión Cristiana Democrática (CDU), aún está lejos de terminar. Nuevas revelaciones indican que la CDU entregó el año pasado 100.000 marcos (8,5 millones de pesetas) a la agrupación democristiana de Ludwigshafen, su ciudad natal. El dinero provenía de los fondos ocultos gestionados por el excanciller, contra quien la Fiscalía de Bonn está a punto de abrir un sumario por malversación, una vez reciba hoy la autorización del Parlamento.

El envío de 100.000 marcos aparece en un informe oficial de contabilidad de la CDU que será presentado hoy al Bundestag, la Cámara baja del Parlamento alemán, según una información publicada en el último número del semanario Focus sobre las cuentas paralelas del partido. En la práctica de la CDU no es inusual que la caja federal del partido subsidie a las delegaciones regionales más pobres, pero sí parece irregular el hecho de que los destinatarios hayan sido en este caso los militantes democristianos de una agrupación local, que además resulta ser la patria chica de Kohl.

Mientras, los portavoces nacionales de la CDU declinaron ayer hacer cualquier comentario al respecto, la organización regional correspondiente al Estado federado de Renania-Palatinado, del que es originario Kohl, confirmó que el dinero se entregó en efectivo y que provino de las cuentas que estaban a cargo del excanciller. Kohl ha admitido haber recibido entre 1,5 y 2 millones de marcos en donaciones no identificadas como tales entre 1993 y 1998.

En la campaña electoral de 1998, uno de los objetivos declarados del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) era vencer a Kohl en su feudo político, y de hecho lo logró pese al apoyo financiero prestado por el entonces canciller a sus correligionarios. Los 100.000 marcos de los que se benefició la CDU de Ludwigshafen encajan bien en lo que se ha llamado el sistema Kohl: la gestión patriarcal y personalista del partido democristiano por parte de quien durante 25 años fue su presidente.

Un día después de que la fiscalía de Bonn anunciara la apertura de un sumario contra Kohl por malversación de fondos en perjuicio de la CDU, uno de los viejos contrincantes democristianos del excanciller, Kurt Biedenkopf, se pronunció ayer por primera sobre el escándalo. En declaraciones al semanario Der Spiegel, el hoy primer ministro del land de Sajonia afirmó que el escándalo plantea la "nada fácil" cuestión de cómo "desprenderse de las estructuras de pensamiento de una época profundamente marcada por Helmut Kohl". Ahora el problema, según Biedenkopf, es cómo "lograr la jubilación definitiva" del expresidente del partido.

Otros destacados democristianos, como el exasesor de Kohl Friedrich Bohl y la presidente de la Unión de Jóvenes Democristianos, Hildegard Müller, se distanciaron ayer de su antiguo líder y pidieron que dé a conocer quiénes fueron los donantes. Hasta ahora, Kohl se ha negado a identificarlos.

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