Irán envía nueve divisiones más del Ejército a la frontera afgana
El Gobierno iraní ha enviado nueve divisiones más hacia la conflictiva frontera con Afganistán para participar en unos supuestos ejercicios militares, llamados Victoria-9, que podrían comenzar el sábado. Al mismo tiempo, la Marina lleva a cabo unos ejercicios similares en aguas del golfo Pérsico. En la zona se encuentran desplegados cerca de 70.000 miembros (tres divisiones) del cuerpo de élite Guardianes de la Revolución. En breve, el despliegue militar iraní alcanzará los 200.000 hombres.Mientras que los hechos y las declaraciones de los generales parecen apuntar hacia la guerra, el ministro de Exteriores de Irán, Kamal Jarrazi, insistió ayer en que su país favorece una solución pacífica y diplomática antes de cualquier opción de fuerza.
Aunque la tensión entre los dos países viene de lejos, ésta se ha incrementado considerablemente en el último mes, desde la toma de Mazar-i-Sharif, el bastión de la oposición en el norte de Afganistán. En esta conquista los talibán asesinaron a nueve diplomáticos iraníes y a millares de civiles shiíes. Teherán exige la extradición inmediata de los asesinos. En caso contrario, se reserva su derecho a atacar.
Los talibán, que ya controlan casi todo Afganistán, han puesto en alerta a 25.000 hombres para repeler cualquier agresión. Aunque su número y la calidad de su armamento es muy inferior, fuentes militares occidentales consideran que una acción a gran escala por parte de Irán está condenada al fracaso. Teherán corre el riesgo de empantanarse, como le sucedió a la URSS, en un conflicto costoso y de larga duración. Estos expertos creen que Irán maneja otras opciones, como la de una acción relámpago de castigo.
