186 muertos y 5.000 heridos
La cifra de muertos en el atentado de Nairobi continuó aumentando ayer a medida que se desvanecían las esperanzas de encontrar a más supervivientes bajo los escombros. El último recuento la elevaba a 176, incluido el cónsul estadounidense, Julian Bartley, la duodécima víctima mortal de esa nacionalidad, identificado anoche. A ellos hay que añadir los 10 fallecidos en Dar es Salam, todos tanzanos.El presidente de Kenia, Daniel arap Moi, confirmó los temores y señaló que se sobrepasarán los 200 muertos. Los heridos -70 en Tanzania- superan los 5.000 en Kenia, donde los hospitales continúan colapsados y los equipos de rescate buscan con la ayuda de perros entre los restos del edificio derrumbado.
Ayer se produjo un rayo de esperanza cuando los equipos israelíes, llegados al lugar pocas horas después de la explosión, encontraron todavía con vida a a una mujer junto a su hijo adolescente. El día anterior habían rescatado a un hombre de mediana edad. Francis Gatili Nganga, que había permanecido 36 horas atrapado bajo toneladas de cemento y hierro retorcido, recibió ayer la visita del israelí Gil Wiener, de 29 años, el hombre que le salvó la vida.
Nganga relató a los médicos su odisea bajo el edificio. Aguantó vivo conversando con una mujer que también permanecía atrapada cerca de él sobre cómo jugar al póquer.
