Sri Lanka acentuará la lucha antitamil tras el atentado contra el banco central
La policía de Sri Lanka aseguró ayer haber identificado a los integrantes del comando suicida de los tigres tamiles que lanzó el miércoles un camión bomba contra la sede del banco central del, país, en pleno corazón de la capital, Colombo. La cifra de muertos asciende ya a 98, según fuentes oficiales, y entre los 1.400 heridos, ninguno de ellos extranjero, se esperan nuevos fallecimientos. El Gobierno esrilanqués afirmó que intensificará las operaciones militares para acabar con las fuerzas rebeldes.
Fuentes del departamento de investigación criminal indicaron que el comando perteneciente a los Tigres de Liberación de la Patria Tamil (TLPT) estaba formado por tres hombres y había llegado a Colombo el pasado 8 de enero desde el bastión secesionista de Jaffna. El conductor del camión, que murió en el atentado, fue identificado con el nombre de Raj. Los otros dos integrantes fueron detenidos posteriormente, según la policía. El TLPT no se ha atribuido la autoría del sangriento ataque, que destruyó varias de las plantas del banco nacional y otros siete edificios del distrito financiero junto a la sede de la presidencia del país. Se estima que el camión iba cargado con 200 kilos de explosivos.Durante toda la jornada de ayer prosiguieron las tareas de retirada de escombros con el ánimo de encontrar personas con vida. Pero se han perdido las esperanzas de rescatar supervivientes y se teme que haya aún más cadáveres sepultados. Los equipos de rescate extrajeron nueve cuerpos completamente carbonizados de la sede bancaria y de los locales de la compañía aérea nacional Air Lanka. Fuentes no oficiales hablaban de un recuento de 152 cadáveres.
El Gobierno ha declarado que va a intensificar la lucha contra los separatistas tamiles que luchan desde hace 13 años por la independencia del norte del país. La minoría tamil, de origen indio, representa aproximadamente el 17% de los 18 millones de habitantes que constituye la población de Sri Lanka, antigua Ceilán. Se concentra especialmente en la región norteña de Jaffna y también en una pequeña bolsa en el este de la isla. Los rebeldes habían prometido vengarse tras la caída el pasado diciembre de su cuartel general en Jaffna, donde desde hace cinco años habían creado una especie de Estado independiente.
La presidenta de la República, Chandrika Kurnaratunga, hizo ayer un llamamiento a la calma al país y reiteró su voluntad de acabar con el terrorismo. Kumaratunga afirmó que cree aún posible una solución política para terminar con un conflicto que ha causado 50.000 muertos desde 1983. Sin embargo, el ministro de Justicia, G. L. Peiris, dijo que se va a intensificar la campaña militar contra los rebeldes.
