Un aspirante a primer ministro de Israel participó en una matanza
Los soldados israelíes del Regimiento de Paracaidistas 890, al mando del entonces coronel Rafael Eytan, mataron a 35 prisioneros egipcios durante la campaña del Sinaí de 1956, que desencadenó la intervención franco-británica en Suez. Así lo desvela un libro sobre ese conflicto elaborado por el investigador de la Universidad de Haifa Motti Golan, a punto de ser editado en Israel con el visto bueno del Estado Mayor del Ejército. Eytan, el legendario combatiente Rafoul, que llegó a a ser general jefe del Estado Mayor durante la invasión de Líbano en 1982, ministro y diputado, aspira ahora a convertirse en primer ministro israelí tras las elecciones generales del año que viene.Las explicaciones que dio a sus superiores Eytan, hoy líder del derechista partido Tsomet, sobre la matanza de egipcios quedan reflejadas así en el libro: "Los prisioneros nos gritaban: 'Os van a matar [en los ataques de la aviación egipcia] a todos'; era más bien desagradable, y, además, los 35 detenidos me impedían contar con tres de nuestros soldados, que tenían que vigilarles".
La matanza de los prisioneros se produjo en una situación límite para el Regimiento 890, aislado y cercado tras las líneas egipcias y a más de 250 kilómetros del grueso de las tropas israelíes. La unidad de Eytan estaba continuamente sometida a los bombordeos aéreos de la aviación de El Cairo y con la moral por los suelos.
El periódico laborista Davar, acaba de anticipar estos, detalles del libro de investigación, saIpicados con críticos comentarios políticos sobre el líder de la oposición nacionalista israelí. La exclusiva de Davar se inscribe, sin duda, dentro de las primeras escaramuzas de la campaña electoral.
Por otro lado, centenares de colonos judíos bloquearon ayer las principales carreteras de Cisjordania, actualmente ocupada por Israel, para protestar contra las negociaciones de autonomía. En varios cruces de caminos, los colonos apedrearon e incendiaron vehículos palestinos y dispararon sus armas al aire, antes de enfrentarse con los policías israelíes que acudieron a dispersar a los manifestantes, 13 de los cuales fueron detenidos.
