El PS Italiano vota por su disolución
El histórico Partido Socialista Italiano (PSI) pasó ayer por una de las páginas más tristes de su centenaria historia al aprobar en el 47º Congreso su disolución, abriendo paso a la escisión. La muerte del PSI se produjo a las 23.10 del sábado, cuando los congresistas sancionaron la disolución con sólo 20 votos en contra, de un total de 596, con 9 abstenciones y la no participación de la minoría contraria a la desaparición del partido, nacido el 14 de agosto de 1892.La propuesta de disolución fue presentada por el secretario saliente, Ottaviano del Turco, deseoso de sepultar para siempre un símbolo y un nombre (el clavel rojo y las siglas PSI) demasiado ligados a la figura de Bettino Craxi, al escándalo de las comisiones ilegales y los tribunales de Milán que investigan la corrupción política.
Por todas partes se ve ahora el nuevo símbolo de los Socialistas Italianos (un SI escrito con rotulador y con el punto de la I coloreado en rojo y debajo del lema Digamos sí al futuro). La tarea de crear un nuevo partido ha pasado de las manos de Del Turco a las de Enrico Boselli, de 37 años, dirigente que Craxi, curiosamente, quiso como segundo del secretario saliente para bloquear su gestión. Michele Zoppo, ex director administrativo del PSI, será el liquidador de todas las propiedades del partido.
