Jaruzelski se presenta a una dura elección presidencial
El general Wojciech JaruzeIski, jefe del partido comunista polaco (POUP), declaró ayer oficialmente su intención de presentarse candidato a la presidencia de Polonia. La votación en la Asamblea Nacional se espera para esta tarde, mientras no está segura la elección de Jaruzelski, contra cuya candidatura se ha pronunciado la inmensa mayoría de los diputados de la oposición y varios parlamentarios de las agrupaciones aliadas del partido comunista.
La decisión la tomó Jaruzelski en una reunión del grupo parlamentario de su partido. El jefe del POUP, quien el pasado 30 de junio retiró oficialmente su candidatura, fundamentó su retorno a la carrera presidencial en el apoyo que ha recibido en las últimas semanas por parte de las direcciones de los partidos aliados del POUP y por el consejo militar del Ministerio de Defensa, así como en las numerosas cartas.Jaruzelski señaló que también hay opiniones contrarias a su candidatura, pero que los argumentos decisivos para él han sido la continuidad del poder, la estabilidad del país y, según su expresión, "el aspecto internacional". Insistió en que "se ha guiado por el sentimiento del deber" y en que en este momento tan importante para Polonia no ha podido declinar su responsabilidad.
Asimismo, el dirigente polaco anunció que, de ser elegido, se concentraría en el ejercicio de las funciones de presidente, con lo cual reafirmó su promesa,. expresada en la reunión que mantuvo el pasado lunes con el grupo parlamentario de la oposición, de no combinar el cargo de primer secretario del POUP con la presidencia del país.
Jaruzelski dijo también que es consciente de que el resultado de la votación de hoy podría ser negativo para él y pidió a los diputados del POUP que, en tal caso, apoyaran en la siguiente votación la candidatura del ministro del Interior y su allegado colaborador, Mieczyslaw Rakowski.
La perspectiva de Jaruzelski de verse elegido hoy presidente de Polonia no estaba ayer del todo despejada. Para salir elegido, necesita el 50% más uno de los votos de los miembros de la Asamblea Nacional presentes en la sala. El partido comunista sólo dispone del 31 % de los votos y, sin el apoyo de los partidos de la cada vez más ilusoria coalición gubernamental, no podrá lograr el triunfo.
Los grupos parlamentarios de los partidos Campesino y Democrático no han impuesto a sus miembros la disciplina de voto y se espera que más de 23 diputados de estos partidos puedan rechazar la candidatura de Jaruzelski. El presidente del grupo parlamentario del Partido Campesino declaró ayer a EL PAÍS: "Temo que el general Jaruzelski no sea elegido si entre 10 y 20 diputados de la oposición no votan a su favor".
La inmensa mayoría de los diputados y senadores de Solidaridad se mantenían firmes en su decisión de votar contra Jaruzelski, en quien ven, sobre todo, al autor de la ley marcial de hace ocho años. En la reunión de la oposición, en una tempestuosa y caótica discusión, los diputados de Solidaridad no repararon ayer en las críticas del líder polaco, cuyas declaraciones, consideradas por ellos como vagas y llenas de rodeos, hechas en la reunión con este grupo, celebrada el pasado lunes, no hicieron más que aumentar la aversión de los parlamentarios rasos de Solidaridad contra Jaruzelski. La presidencia del grupo parlamentario de la oposición parecía incapaz de convencer a sus miembros de la necesidad de abstenerse en la votación, o de salir del hemiciclo en vez de levantar la mano contra el general.
