El presidente portugués, contra los intentos de recortar sus competencias
El presidente de Portugal, general Antonio Ramalho Eanes, ha protestado públicamente contra la progresiva anulación de las «responsabilidades y competencias que le han sido atribuidas por el pueblo portugués en una elección democrática reciente ».«No puedo permitir que la dignidad de la jefatura del Estado sea cuestionada ni que acciones de ámbito y objetivos nacionales sean aprovechados para querellas partidistas», declaró el general-presidente a los periodistas para explicar las razones que le llevaron a anular su participación en la sesión inaugural del primer congreso de emigrantes portugueses que se inició en Lisboa el lunes.
El aviso de Eanes de que no puede ni debe aceptar pacíficamente ver reducidas sus funciones a un papel meramente decorativo debe leerse dentro del contexto de la crisis que sacude al Gobierno y la coalición de centro derecha en el poder.
En las últimas semanas se han producido pequeños incidentes entre Alianza Democrática y la Presidencia de la República,
Más significativo es el hecho de que, a propósito de la actual huelga general de ferrocarriles, el semanario Expresso, citando «un informador del Gobierno», admitiese que este conflicto laboral fue provocado por el CDS «para desprestigiar al primer ministro o incluso derribar al Gobierno».
Ante el extraño hecho de que un sindicato como el de los maquinistas de trenes, con poco más de un millar de miembros, esté en condiciones, como anunció, de pagar íntegramente los salarios de los huelguistas durante dos semanas, el semanario propiedad del primer ministro, Francisco Pinto Balsemao, se refiere a la hipotética existencia de «un plan global de desestabilización política», que culminaría en octubre y contaría con el apoyo internacional de la extrema derecha».
