_
_
_
_
Entrevista:

"Debería ser posible abordar la información a través del cine"

Elías Querejeta, productor cinematográfico

Los profesionales del cine comentan, de tarde en tarde, alguna vaga referencia a la próxima ley del Cine. La Administración ha tiempo que no da señales de vida al respecto, y mientras tanto, la industria cinematográfica continúa produciendo películas. Para conocer, en alguna medida, la situación de un productor, EL PAIS mantuvo con Elías Querejeta la siguiente entrevista:-¿Qué ocurre con la ley del Cine?

-Si no recuerdo mal, creo que las leyes, en este país, deben ser aprobadas, para su efectividad, por las Cortes. Dado que las Cortes se hallan en lo que podríamos llamar «un período tambaleante», me imagino que las leyes que tienen su origen en la situación anterior al 20 de noviembre de 1975 sufrirán las consecuencias del traqueteo. Bueno sería que esto sucediera y que, de una vez por todas, la ordenación de la actividad cinematográfica supusiera para el cine la posibilidad de realizarlo de una manera auténticamente libre y espontánea. Vamos. como quien lava.

-¿Qué entiende por realizar el cine «de una manera auténticamente libre y espontánea»?

-Sustancialmente, la posibilidad de aplicar a la creación cinematográfica cada uno de los medios técnicos con que actualmente se cuenta; la posibilidad de utilización de los formatos pequeños - 16 y super 8 milímetros-; la posibilidad de abordar la información a través del cine; la posibilidad de convertir el cine en un vehículo vivo y directo, que no solamente produzca ese tipo de películas subsecuentes al fenómeno literario, sino que adquiera de una vez su específica y multiforme capacidad de lenguaje y expresión. En definitiva: ¡Fuera burocracia!; ¡fuera controles!, y que sea el público, desde su exigencia y su deseo, quien sustancialmente trace las líneas de actuación de los que han adoptado el cine como actividad creadora.

-Sin embargo, de ahí se deduce que el realizador de cine habría de adaptarse exclusivamente a los criterios del público. Es decir, habría que fiarse de las películas de mayor recaudación para conocer los gustos e intentar imitarlos...

-No, no, en absoluto. Se crearía una dialéctica que, en cualquier caso, sería más real y más esclarecedora que aquella que hasta ahora ha dominado el panorama, y que suponía que hacer cine era dialogar, antes que nada, con instancias del Poder constituido.

Información y cine

-Antes hacía referencia a la «posibilidad de abordar la información a través del cine». ¿Qué información?-Ya se sabe que la información a través de la imagen está controlada, en este país, por dos instituciones dependientes directamente del Poder: Por una parte, Televisión, y por otra, el NO-DO. Ambas han demostrado su profunda ineficacia, por no decir su consustancial falacia. Deben ser desmanteladas y hay que abrir la posibilidad de una auténtica información concebida, naturalmente, desde posiciones diversas, que aborden lo que está sucediendo en la calle, lo que sucedió y lo que sucederá, y cuando digo en la calle, digo también en las conciencias.

-Sin embargo, el termino «información» conlleva la manipulación de unos hechos, manipulación que, en ocasiones, se muestra en el silencio en no comunicar determinados hechos. Hablar de «auténtica información» parece esquematizar en exceso el fenómeno.

-No se puede decir que haya una y sólo una auténtica información, porque no hay una verdad única ni una perspectiva única para contemplar un fenómeno cualquiera. Por tanto, cuando digo información me refiero, por supuesto, a información múltiple que pueda ofrecer de cada acontecimiento, de cada problema, una visión crítica y no necesariamente homogénea.

-¿Supone todo esto que Elías Querejeta piensa producir películas de tipo informativo?

-Naturalmente, aunque de modo harto precario, algo se ha podido incidir en el llamado «cine de ficción». En cambio, en otros posibles tipos de cine la carencia es prácticamente total. Lógicamente, mi intención será abordar esos tipos de cine cercanos al ensayo o a la información.

¿Liberalización?

-Y ya para finalizar, ¿cree que la reciente autorización de películas como La ciudad quemada, Iconockaut o Canciones para después de una guerra, supone un deseo de liberalización por parte del Ministerio de Información y Turismo?-Antes que nada, me alegro muchísimo de que esas películas se puedan ver, pero sucederá, una vez más, que cuando se vean, cualquiera que tenga dos dedos de frente, se preguntará en razón de qué mentecatez o miseria mental han podido estar prohibidas tanto tiempo. El problema del cine, como el del país en general, es el de la inmensa cantidad de horas malgastadas.

Elías Querejeta produce en la actualidad una película dirigida por Emilio Martínez Lázaro. Tras ella comenzará Elisa, vida mía, de Carlos Saura, y después tiene previsto producir dos nuevas películas a Jaime Chávarri y Ricardo Franco. De lo expuesto se deduce que el cine informativo, documental o verité, o como quiera ser llamado, entra dentro de sus próximas producciones.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_