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Dos aviones Concorde aterrizaron en Washington

Dos aviones Concorde procedentes de Londres y París aterrizaron ayer en el aeropuerto Dulles, iniciando una nueva etapa en las comunicaciones con los Estados Unidos mediante aviones supersónicos de pasajeros.

Ambos aviones fueron objeto de recepciones oficiales y de manifestaciones de protesta por organizaciones para la defensa del medio ambiente. Para los que trabajaron en el proyecto franco- británico, la llegada de los dos Concorde a los Estados Unidos -con pocos minutos de intervalo, alrededor de las doce de la mañana-, es una victoria tras un largo y difícil proceso. Para los defensores del medio ambiente supone, por el contrario, una amarga derrota.

Ocupadas todas las plazas

Representantes de la British Airways y de la Air France declararon que en el vuelo inaugural de ambos aparatos, de color blanco y azul, todas las plazas estaban ocupadas. A bordo de cada avión viajaron 76 personas. El de Londres salió a las ocho de la mañana y el de París cinco minutos después.Los aviones volaron a una velocidad de 2.160 kilómetros por hora y cubrieron la distancia desde las capitales europeas a Washington en cuatro horas.

El piloto del Concorde que salió de Londres, es Brian Calvert, de 42 años, que aprendió su oficio en la Marina Británica y fue también empleado en un Banco de Londres. En 1967 empezó su participación en el proyecto Concorde.

Las plazas para el Concorde están ya vendidas con bastante antelación. Todos los pasajeros de los vuelos de ayer tuvieron que comprar sus billetes mucho tiempo antes de que el avión iniciara sus viajes regulares.

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La seguridad del aeropuerto de Dulles se reforzó en previsión de que los manifestantes realizaran actos de violencia. Sin embargo, no hubo ningún tipo de incidentes.

Después de este vuelo inaugural, tanto la compañía inglesa como la francesa realizarán tres vuelos por semana. El precio de los billetes es de unos 1.600 dólares, aproximadamente el 20 por 100 más de lo que cuesta un billete de primera clase en un vuelo normal.

Por lo demás, los pasajeros son espléndidamente obsequiados en el viaje. En la carta se ofrecieron alimentos y bebidas de la mejor calidad. En la minuta había caviar o foie gras, salmón fresco, espárragos, filetes y vino de Burdeos.

El piloto del Concorde inglés declaró en Washington que poco antes de aterrizar estuvo a punto de chocar contra otro aparato.

Los vuelos se realizarán durante 16 meses en período de prueba, hasta que las autoridades USA concedan el permiso definitivo para los aterrizajes en Washington.

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