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Reportaje:

Tres homenajes, un artista

El museo Chillida-Leku de Hernani, el Museo Guggenheim de Bilbao y la Fundación Marcelino Botín de Santander coinciden en rendir homenaje al gran escultor vasco Eduardo Chillida

Tres exposiciones, un artista. El Museo Chillida-Leku de Hernani (Guipúzcoa), el Museo Guggenheim de Bilbao y la Fundación Marcelino Botín de Santander, coinciden en rendir homenaje al gran escultor vasco Eduardo Chillida. La exposición del Chillida-Leku ha sido inaugurada hoy y recoge 65 obras que el escultor hizo en homenaje a creadores y pensadores como Johann Sebastian Bach, Joan Miró y Salvador Allende. Asimismo, el Museo Guggenheim ha presentado una muestra de 45 artistas contemporáneos reconocidos internacionalmente, que abrirá sus puertas al público mañana. Mientras que la Fundación Marcelino Botín inaugurará el jueves la muestra Eduardo Chillida 1924-2002.

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La muestra de Chillida-Leku ha sido inaugurada en un acto celebrado en este museo al aire libre al que han acudido diversos creadores como Joan Genovés, Marcus Lüpertz, Arnaldo Pomodoro, Miquel Navarro, Andrés Nágel y Luis Rodríguez Gordillo. A la celebración también se han sumado numerosos familiares de Eduardo Chillida, entre los que se encontraban sus hijos y su viuda, Pilar Belzunce, quien a deseado que su marido esté "contento" ahí "arriba" al ver reunidas las 65 obras con las que homenajeó a 40 personalidades.

Luis Chillida, director del museo, ha asegurado que su padre también rindió tributo a sentimientos y valores como la "tolerancia y la libertad" y a todas las figuras de las que aprendió y le sirvieron de fuente de inspiración. Los homenajes han estado siempre muy presentes en la obra de Chillida desde que creó en 1952 el primero de ellos, El Homenaje a Vivaldi. Posteriormente elaboró otras 150 obras que pueden agruparse en tres apartados, el primero de los cuales engloba sus homenajes a pintores y escultores como Balerdi, Brancusi, Braque, Calder, Giacometti, Gris, Hokusai, Kandinsky, Millares, Miró o Picasso.

El segundo grupo se dedica a los músicos e incluye tributos a Vivaldi y Bach, compositor por el que mostró gran devoción y al que dedicó tres esculturas de acero. El tercer bloque esta compuesto por un grupo heterogéneo de personalidades, entre las que figuran científicos, poetas, filósofos y políticos como Martin Heidegger, Salvador Allende, Pablo Neruda, San Juan de la Cruz y el poeta Jorge Guillén, considerado éste último fundamental en la obra de Chillida.

Las personas que se acerquen al Chillida-Leku podrán disfrutar hasta el 25 de septiembre de estas piezas de piedra, metal y papel a través de las cuales podrán conocer algo más de la figura de un artista que sintió curiosidad por la filosofía, el arte, la antropología, las matemáticas y las letras.

El Museo Guggenheim de Bilbao

La exposición del Guggenheim reúne las piezas que dedicaron a Eduardo Chillida artistas de la talla de Manolo Valdés, Richard Serra, Georg Baselitz y Robert Rauschenberg.

También participan en este tributo Anthony Caro, Antoni Tapies, Ron Kitaj, Christo, Zao Wou Ki, A.R. Penk, Tony Cragg y Miquel Barceló, entre otros, cuyas obras son de tendencias artísticas muy diversas, pero todos comparten el común denominador de haber conocido personalmente al artista vasco.

El comisario de esta muestra, Kosme Barañano, ha presentado hoy en conferencia de prensa esta exposición, que se abrirá mañana al público, junto al director del Guggenheim Bilbao, Juan Ignacio Vidarte, y al presidente del Grupo Urvasco, Antonio Iraculis, a cuya fundación pertenecen todas las obras de la muestra. También asistió al acto Luis, uno de los hijos de Chillida.

La Fundación Marcelino Botín de Santander

Ya por último, la Fundación Marcelino Botín inaugurará el próximo jueves la muestra Eduardo Chillida 1924-2002, una retrospectiva de la obra del escultor vasco.

La muestra de Santander girará en torno a la obra Homenaje al mar, un alabastro de gran tamaño que se situará en el patio central de la sala, e incluirá 113 obras fechadas entre 1948 y 1999, de las que algunas saldrán por primera vez fuera de San Sebastián. Así, el espectador podrá contemplar esculturas de diversos materiales, dibujos de distintos épocas y temas, gravitaciones, grabados, collages y libros de autor.

Sentimientos de amistad, agradecimiento y admiración son los que movieron a Chillida a crear dichas obras. El carácter polifacético del escultor y su interés por variopintas disciplinas queda patente en sus homenajes dedicados a artistas, músicos, pensadores, escritores o matemáticos.

El Museo Guggenheim Bilbao acoge una exposición que rinde homenaje a Eduardo Chillida. En la imagen, la escultura de Manolo Valdés, <i>Horta de Ebro</i>.
El Museo Guggenheim Bilbao acoge una exposición que rinde homenaje a Eduardo Chillida. En la imagen, la escultura de Manolo Valdés, Horta de Ebro.EFE
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