Iceta avisa a Colau de que no colaborará con un gobierno que se salte la ley

Miquel Iceta, primer secretario de los socialistas catalanes, ha advertido esta mañana a la alcaldesa de Barcelona Ada Colau que los socialistas no podrán seguir respaldando al gobierno municipal en el caso de que el Ayuntamiento acabe apoyando el referéndum del 1 de octubre. "No podremos colaborar con un gobierno que se salte la ley, ni en Barcelona ni en ninguna parte", aunque ha precisado: "Creo que eso no se producirá".

En una entrevista en Rac1, Iceta ha aclarado que debe ser el líder de los socialistas de Barcelona y teniente de alcalde, Jaume Collboni, quien debe responder si los socialistas dejarían el Gobierno municipal. Sin embargo, Iceta ha remachado: "Para la tranquilidad de todos, nosotros en gobiernos que se saltan las leyes no participamos". Con todo, Iceta ha recordado que la alcaldesa ha dicho ya varias veces que no está dispuesta a poner en peligro "a los funcionarios". Colau, sin embargo, ya afirmó la semana pasada que el Consistorio pondrá todas las facilidades para que se pueda votar el 1-O.

Puede que el 1-O haya un simulacro de votación: con lugares para votar, cajas y algún papelito", dice Iceta

En sus declaraciones, Iceta ha remarcado que a ningún cargo electo "le recomendaría que se saltase la ley" porque "incurriría en unas responsabilidades penales que creo que nos tenemos que ahorrar". El socialista ha pronosticado que el 1 de octubre habrá un "simulacro de votación es muy posible que se haga", con "lugares de votación, cajas y algún papelito", pero en cualquier caso no será "un referéndum efectivo, vinculante y con garantías".

La opinión del PSC supone, en cualquier caso, una presión añadida para los comunes, que desde hace semanas están siendo muy criticados por los independentistas por no dar apoyo a la votación planeada por Carles Puigedmont. Catalunya en Comú intenta ahora ponerse de perfil a la espera de cómo transcurran los acontecimientos. A las presiones externas de uno y otro lado se suman las internas: cerca de 300 militantes de la base han firmado un manifiesto asegurando que no participarán en la votación.

Catalunya en Comú acordó el pasado día 8 un documento en el que considera que la consulta anunciada por Puigdemont no es un referéndum al uso, aunque apuntaba que apoyará, en abstracto, todas las movilizaciones en favor del derecho a decidir. Por tanto, dejó en el aire su posible implicación en la consulta. La ambigüedad del texto aprobado ha dado pie a múltiples interpretaciones. Tras el cónclave, Xavier Domènech, coordinador del partido, afirmó que la posible participación de los comunes en la consulta se acordará en septiembre, además de su predisposición a votar. El pasado domingo, Domènech firmó un artículo con Pablo Iglesias dando apoyo al 1-O por considerar que es una movilización legítima.