Excarcelado el hermano del asesino confeso de Marta del Castillo

Francisco Javier Delgado, el hermano de Miguel Carcaño, asesino confeso de la joven sevillana Marta del Castillo, va a quedar en libertad, después de que el juez instructor haya dictado una orden de excarcelación inmediata. El magistrado del Juzgado de Instrucción 4, Francisco de Asís Molina, considera que la actuación del imputado no fue predominante y que su participación fue de menor entidad que la del resto de imputados. Además, considera que el riesgo de fugas y de que elimine pruebas se ha atenuado, aunque mantiene los cargos contra el acusado.

Delgado estaba en prisión acusado de ser cómplice de su hermano, Miguel Carcaño, y dos amigos de éste (Samuel Benítez y Javier G.) en el asesinato de la joven Marta del Castillo. Por ello fue encarcelado el pasado 19 de febrero. El auto judicial consideró entonces que Delgado fue el encargado de borrar los rastros de lo sucedido en la escena del crimen, situada en el piso de León XIII. Además, se consideró que había sido él quien dio instrucciones a su hermano y el resto de imputados para que se enfrentaran a la investigación judicial.

Posición no predominante

El juez señala ahora que los datos recabados por la Policía Nacional no son suficientes para sostener que el acusado tuvo un papel decisivo en el asesinato de la joven y de su desaparición. El auto recoge que "la posición del imputado no fue predominante en los hechos objeto de este proceso pues habría desempeñado, en el escenario que hasta ahora conocemos, un rol de menor entidad comparativamente al de los restantes imputados".

El acusado siempre ha insistido en que es inocente y en que no participó en el crimen. Pese a que este mismo juez, y luego la Audiencia provincial, rechazaron en abril una primera petición de libertad de Delgado, el magistrado ha decidido ahora de oficio reformar su propia decisión pues, con el

progreso de la investigación, se han cumplido los objetivos propuestos. Según, el texto señala que "aún persisten los indicios de criminalidad" contra el acusado, por ello le impone la obligación de personarse

en el juzgado todos los lunes "y cuantas veces sea llamado".

El juez ha tomado la decisión tras hacer "una ponderación necesaria de los presupuestos de la prisión preventiva, que variará según nos encontremos en la fase inicial del proceso penal o en un momento posterior". El sospechoso, que es vigilante jurado de profesión, negó tanto ante la Policía como en sus declaraciones ante el juez haber conocido el crimen de Marta, tanto el día que se cometió como con posterioridad, así como haber participado en la limpieza del piso donde se produjo.

Su coartada fue ratificada por su ex esposa, con la que cenó la noche del crimen, por su actual novia y por otras pruebas que lo situaron la noche del crimen en el bar del barrio de Nervión, donde trabajaba, además de ser reforzada por los registros de las antenas de telefonía utilizadas en las llamadas desde su móvil.