El Festival de Mérida convierte la Alcazaba árabe en un espacio escénico
Las jóvenes compañías Chapitô, Spanish Percusión con Kowalski y Balbo Teatro representarán estos días sus últimos montajes
La Alcazaba, un bello edificio árabe del siglo XIV situado en el centro de Mérida, se ha convertido en uno de los espacios escénicos del Festival de Teatro Clásico de Mérida que este año, en el transcurso de su 53 edición, ha programado en este espacio aquellos espectáculos más arriesgados y marcados con jóvenes lenguajes plásticos, escénicos y musicales.
En los próximos días la Alcazaba y sus 661 butacas acogerán los estrenos de la compañía portuguesa do Chapitô (día 27) con El gran creador, el grupo plástico-musical Spanish Percusión Group & Kowalski (día 28) con sus propuestas sonoras y de video y el grupo juvenil Balbo Teatro con una versión íntegra de Las Troyanas.
Francisco Carrillo, director de la muestra, afirma que lo que se pretende con este nuevo espacio es incorporar a la programación del festival espectáculos muy distintos a los que hasta ahora se programaban tanto en su aspecto formal como en su temática: "El gran teatro romano limitaba mucho lo que se puede programar y ahora tenemos otras opciones interesantes y con un nivel de riesgo formal que piden menos espacios más pequeños". En cualquier caso lo que sí quiere el director es que los espectáculos que acudan a la Alcazaba estén marcadas por un espíritu joven, no necesariamente marcado por la edad si no por la manera de plantearse la creación escénica. "Como objetivo final me gustaría que fuera un espacio para la investigación teatral y musical en todos los sentidos y que a la vez se compartiera con el público, pero dejando claro en todo momento que no es un off, sino un espacio más de la programación de la muestra en la que queremos ofrecer propuestas diversas, sin que ninguna sea menor que otra"., concluye Carrillo que inauguró el nuevo espacio con varias coreografías de la Compañái Nacional de Danza 2, el pasado día 13.
La propuesta escénica de estos días ofrece como punto en común la juventud de sus creadores.
La Compañía Chapitô, que representa su montaje El gran creador en castellano, lleva años trabajando en Lisboa con un lenguaje muy específico y fundamentalmente centrado en lo físico y el gesto, aunque utilizan también la palabra. En esta ocasión plantean una parodia llena de humor blanco sobre diversos fragmentos y pasajes de la Biblia, ya que han decidido humanizar a Dios. Chapitô es algo más que un grupo de teatro ya que afrontan desde hace dos décadas un proyecto basado en tres áreas: la social, la cultural y la de formación y en todo momento tratan de cruzar esos tres frentes de manera que han terminado desarrollando una microeconmía social en lo que podría ser una pequeña y personal miniciudad. "Sólo nos falta una panadería y un pequeño supermercado", dicen con una parte de humor y otra de proyecto pendiente de realizar.
La filosofía de la compañía no se centra en el texto escrito como base, pero su puesta en escena colectiva, acompañada de técnicas de improvisación y de comedia clownesca, sirven al grupo de base para expresar una crítica irónica de nuestra realidad social.
El objetivo de Chapitô, fundado en 1981 por la clown lusa Teresa Ricou, es la integración social a través de las artes del espectáculo, como son el circo, la danza, el teatro, la música o las creaciones multimedia.
Al igual que otros espectáculos El Gran Creador, es una propuesta teatral colectiva. Aquí se reflexiona acerca del papel que juega Dios en la actualidad, enlazándolo con diversos temas sociales relacionados con la condición humana. Para ello, han planteado una escenografía innovadora, basada en improvisaciones sobre pasajes bíblicos del génesis y la creación, en la que numerosos interrogantes se plantean al "gran creador" y quedan sin respuesta. Está interpretada por tres actores, Jorge Cruz, José Carlos García y Luis Rebelo, que otorgan un tono irónico y de comedia a ocho historias, a modo de capítulos, que conforman la estructura de la función.
Metamorfosis (28 de julio) es una propuesta musical experimental de Spanish Percussion Group & Kowalski en la que ofrecen temas de Wetlake, Reich, Levitan y Cage, entre otros, y donde se mezcla la música clásica, la video-creación y a las artes emergentes.
El grupo musical habla de manera casi minimalista de su trabajo: "Nace de la necesidad de expresar lo que nuestra sociedad, nuestro mundo y nosotros mismos hacemos a diario. Tiempo de cambios, de confusiones y de fusiones. Lo que es mañana puede no ser. Porque evolución no significa perder costumbres y cultura, desprendernos de nuestras raíces, si no todo lo contrario, significa fusión, enriquecimiento y evolución. Descubrir nuevas formas artísticas y entremezclarlas supone todo una experiencia para nuestros sentidos".
Formado por cuatro jóvenes españoles Spanish Percusión Group comenzó sus primeros pasos en Neopercusión, donde tuvieron la oportunidad de actuar en diversos certámenes. El espectáculo que ahora ofrecen en Mérida nace como una forma de hablar de los cambios que están produciéndose en el planeta y en la vida de las personas. Para ello han contado con La Metamosrfosis de Kafka, "aunque no hemos hecho la lectura exacta del libro, sino algo muy nuestro, al tiempo que la música está basada en lo más ancestral, pero a través de compositores contemporáneos que han basado sus temas en la música africana", dice este grupo que además utiliza voz, chillidos, percusión y a la joven creadora Kowalski que ha querido dar importancia a la materia, desde lo más pequeño, como pueden ser átomos hasta cosas más grandes: "Lo pequeño nos puede hacer muy felices, le he dado a esta obra un ambiente metafísico así como más ambiente personal", señala la creadora.
Las Troyanas (29 de julio), obra que entra de lleno en la especificidad de este festival dedicado al mundo grecolatino, es la apuesta del grupo Balbo Teatro del Puerto de Santa María, el grupo que quedó mejor situado en el pasado Festival Joven Grecolatino, creado a instancia de un profesor que siempre trabaja con los textos originales e íntegros de las obras que elige.
La obra es una versión del texto de Eurípides dirigida y adaptada por el director del grupo, Emilio Flor. La compañía, aunque joven, no es desconocida en la escena emeritense, ya que ha participado en todas las ediciones del Festival juvenil grecolatino de la capital extremeña, con versiones de algunos textos clásicos.
En esta ocasión abordan este alegato contra la guerra que el autor presenta desde el punto de vista de los perdedores.
Babelia
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