_
_
_
_
Crítica:CINE
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Merlin, el rey Arturo y los demás

Excalibur.Desde que el cine se inventó, o al menos desde que tomó conciencia de sí mismo como arte, ha sido comparado asiduamente con la literatura a la que en numerosas ocasiones tomó prestados argumentos o héroes. Sin embargo, la palabra, al expresar conceptos, con su capacidad de síntesis, siempre fue superior a la imagen.Todo esto viene a la memoria viendo esta nueva versión del rey Arturo y sus famosos caballeros, leyenda medieval recogida por Christian de Troyes. Sus aventuras difundidas a lo largo de los siglos a través de sus cantores orales y numerosos escritos ha sido aprovechada más tarde por el cine, adaptándola a los gustos de diversos públicos, desde los tratamientos épicos a los más conocidos musicales. Difícil empeño, pues la imaginación particular siempre irá más allá de los efectos especiales.

Dirección: John Boorman

Guión: Rospo Pallenberg y John Boorman, según la obra de Malora: "La muerte de Arturo". Intérpretes: Nigel Terry, Helen Mirren, Nicholas Clay, Cherie Lunghi, Paul Geoffrey y Nicol Williamson. Color. Leyenda, 1980. En el cine Palafox.

Pues si de algo peca esta versión de Boorman es justamente de fantasía escasa y un mal gusto evidente. Parece como, si hubiera hecho suya aquella frase de Lope recomendando ponerse a la altura de quien paga el billete de entrada.

Todo el sabor o el encanto de las leyendas medievales, su lenguaje a ratos coloquial y a ratos solemne, que ya mira a la novela moderna en los textos de Malory, están borrados aquí entre combates que acaban por fatigar y un arranque confuso de genealogías a descifrar por entendidos del género. Acercar la época del rey Arturo y su corte a nuestros días no es disfrazar a las princesas de hippies ni la cámara de la famosa mesa o tabla redonda en discoteca medieval para luego salir a la luz de paisajes y castillos auténticos. En esta mescolanza, toda una teoría de conceptos tribiales, en boca del mago Merlin, hacen que lo mejor de la historia sean, a la postre, las escenas exteriores, seguramente porque la naturaleza resulta más sabia y eficaz, por tanto, que los equipos refinados de ambientadores y decoradores. Ni la ayuda de Wagner y Orff, discutible no sólo en el estilo, sino por demasiado conocidos como creadores de mundos cerrados y particulares, ni la fotografía, ni los duelos, ni el esfuerzo de los actores, ni el hacer el amor con la armadura puesta, alarde de técnica y virilidad que, alza un clamor de regocijo entre los espectadores, llegan a salvar a esta película que en su segunda parte se pierde en excesos oníricos, intentando explicar a un público bastante menos cercano a las leyendas o milagros que el medieval, una en la que es preciso creer o no creer, para bien o para mal, para salvarse en cuerpo y alma aun, a riesgo de enloquecer como nuestro muy ilustre don Quijote de La Mancha.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_