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300.000 sobres de azúcar para una creación artística

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El hombre con coleta y poblada barba blanca se acerca al rompeolas de Barcelona, acompañado por un reducido grupo de incondicionales. Todos llevan una herradura y un paño de algodón en la mano. El hombre de aspecto hierático envuelve la herradura con el algodón y la lanza al mar, seguido por sus acompañantes. Hasta aquí la acción que el artista estadounidense Lawrence Weiner (Nueva York, 1942), una de las figuras clave del arte conceptual desde los 60, realizó hace unos días en el marco del proyecto La cresta de una ola, que concibió para el Nivell Zero de la Fundación Suñol, donde se expone hasta el 15 de noviembre. La acción fue la parte más críptica y secreta de un proyecto que se abre a la ciudad a través de 300.000 sobrecitos de azúcar, que han sido distribuidos a una larga lista de bares y restaurantes.

Cada bolsita luce en rojo sobre amarillo chillón, la frase "un paño de algodón envuelto alrededor de una herradura de hierro, lanzado contra la cresta de una ola", en la característica y llamativa tipografía de Weiner y un dibujo que evoca la trayectoria del lanzamiento. "Es una especie de regalo invisible que el artista hace a la ciudad. Una pieza sutil, democrática y distribuida, que contrasta con el carácter conmemorativo y celebrativo de las obras públicas tradicionales", indicaron los comisarios del proyecto, Max Andrews y Mariana Cánepa.

La frase que describe la acción se repite como un mantra también en las dos instalaciones realizadas para el espacio de la Fundación: en un caso, pintada en la pared del patio, y en el otro, convertida en una composición sonora.

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