Lalachus, de Fuenlabrada a la Puerta del Sol: “Para la gente que vive en el centro de Madrid salir de la M-30 es como carbonizarse”

Aunque en su entorno todos la llaman Lala, el nombre real de Lalachus, famosa por ser una de las cómicas del programa La Revuelta, es Laura Yustres. Para más señas, la “gansa” de su cole de Fuenlabrada, hija de dos manchegos, directora de la revista del instituto y, más tarde, recepcionista y trabajadora de atención al cliente durante más de una década. Ahora, con 34 años, la humorista es tan conocida y querida que presentará las Campanadas de TVE con David Broncano.

Juntos darán la bienvenida al 2025 (si habrá rima o no aún no se sabe) desde el balcón de la Puerta del Sol reservado para Televisión Española. Sobre este hito en su carrera, pero también sobre ella misma y de dónde viene, la humorista ha hablado recientemente con la periodista de EL PAÍS Luz Sánchez-Mellado en una entrevista: “Me muero de la ilusión. Igual luego termino y pienso: “Vaya cuadro de comedor, pero va a ser una noche que no voy a olvidar en la vida”, dice sobre lo de las Campanadas.

Su estilo, entre despreocupado pero extremadamente vital, siempre pasado por el filtro de la risa, es inconfundible: “Tengo mi tipo de comedia”, confiesa en la entrevista. “Intento hablar de las cosas que me pasan. Y reírme de mí misma. El humor lo llevo por bandera siempre”. Aunque recuerda que a veces también se ha hecho cuesta arriba: “Siempre he sido una persona muy insegura, hasta cierta edad. Si me lo paso por el papo ahora (sobre comentarios sobre su físico) es porque me hizo sufrir mucho en su día”.

Lalachus asegura que todo pasó, que vive un momento feliz. De la Lala del pasado queda una querencia por su barrio de siempre, en Fuenlabrada, donde sigue viviendo: “Allí está mi gente, mi familia y yo vivo muy a gustico”. Sobre vivir en el extrarradio, bromea con Sánchez-Mellado: “Parece que para la gente que vive en el centro salir de la M-30 es como si fuera a carbonizarse”. Y reflexiona: “Los del extrarradio tenemos una cosa especial. Cuando venía a trabajar a Madrid de recepcionista y me volvía en tren a mi casa, en el trayecto se te bajaban todos los humos que pudieras tener”.

[Lee la entrevista de Luz Sánchez-Mellado a Lalachus: “Ahora me veo más guapa que nunca porque me quiero”]