_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Yolanda Díaz en ‘Lo de Évole’: dientes, dientes

La sonrisa de Yolanda Díaz es a la derecha lo que las ocurrencias de Ayuso a la izquierda: la prueba fehaciente de que a menudo no es que no estemos de acuerdo, es que ni siquiera hablamos el mismo idioma. Pero trasciende la división ideológica

Yolanda Díaz, este pasado domingo en 'Lo de Évole'.Vídeo: EPV
Paloma Rando

Es exhortación de folclórica a su novio alcalde mientras paseaban delante de la prensa que los acribilla, pero “dientes, dientes, que es lo que les jode” también podría ser un mandamiento autoimpuesto de Yolanda Díaz. No lo es. En Lo de Évole quedó claro que la sonrisa perpetua de la ministra de Trabajo es un acto involuntario. Probablemente por eso jode más que la de la Pantoja.

Cuando digo que molesta, no me refiero al comentario de Maruja Torres que emitieron en el programa, una crítica acertada a cierto espíritu cursi. La confrontación con educación de las ideas en lugar de la lucha de personalidades suscita mucho rechazo entre quien vive la política como una constante tocada de escaño. La sonrisa de Yolanda Díaz es a la derecha lo que las ocurrencias de Ayuso a la izquierda: la prueba fehaciente de que a menudo no es que no estemos de acuerdo, es que ni siquiera hablamos el mismo idioma. Pero trasciende la división ideológica: Pedro Sánchez y Pablo Iglesias son ejemplos de ello.

Perdura una invitación machista a la sonrisa femenina cuando a los políticos jamás se les ha requerido una cuota de simpatía o afabilidad. Sonríe, mujer, que estás más guapa. Pero también a ellas se les pide, con mayor o menor grado de obligación, que se comporten como ellos. Qué lío. Puede terminar una como la Mona Lisa.

Si la yakuza (con la que empezó el programa), gusta de amputar falanges de los meñiques, seguro que hay enemigos íntimos de aquel partido que se autodenominó “de las sonrisas” que preferirían ver a Díaz sin dientes. Al final quien le quitó la sonrisa fue Jordi Évole, que comenzó el programa señalando su obvia sintonía con ella. Cuídame, Señor, de las sintonías, que de las sonrisas ya me cuido yo.

Puedes seguir EL PAÍS TELEVISIÓN en Twitter o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Paloma Rando
Redactora, columnista y guionista de televisión. Empezó a trabajar en el medio en 2006, en el departamento de vestuario de diferentes series, y dio el salto a guion en 2012. Su último trabajo emitido es 'Señoras del (h)AMPA'. Ha desarrollado series para Alea Media, Shine Iberia, Secuoya, Zeta studios y Suma content, entre otras productoras.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_