Delia Fiallo, dueña, señora y autora
La gran creadora de telenovelas ha muerto y la denominación de origen del género que ella popularizó languidece a manos de las pasiones turcas, que en España conquistan cada vez más franjas de la parrilla


Lucecita, Leonela, Kassandra, Topacio, Cristal, Rosalinda, Luz María… Esta columna se podría llenar tan solo con los títulos, la mayoría con nombre de mujer, que creó la gran Delia Fiallo, fallecida la semana pasada en Miami a los 96 años. Delia ha muerto y la denominación de origen del género que ella popularizó languidece a manos de las pasiones turcas, que en España conquistan cada vez más franjas de la parrilla: a partir de este lunes Tierra amarga, que se estrenó la noche del domingo en el prime time de Antena 3, sustituye a Ahora caigo.
En una entrevista con Javier Blánquez, Fiallo atribuyó el éxito turco a su semejanza con los culebrones latinos: “Han venido a reivindicar el género”. Un género que vuelve a arrasar porque explota las emociones y que suele estar infravalorado por la crítica por vulgar, como si fuese irrelevante atrapar la atención de millones de espectadores. Contaba el guionista Leonardo Padrón, en una entrevista en El Nacional de Venezuela, que en los noventa, en medio de las limpiezas étnicas en Bosnia, el único momento de tregua entre las diferentes facciones en guerra era el de la emisión de Kassandra.
No sabemos si las telenovelas turcas han conseguido más tregua que la que dan de su rutina a sus millones de espectadores, que no es poca. Tampoco tenemos mucha información sobre sus creadores, algo muy llamativo ahora, cuando el auge de las series hace que se tenga más en cuenta que nunca a los autores televisivos. En medio de ese furor por el último estreno de las plataformas, abocamos al anonimato a las obras televisivas cuya popularidad no está envuelta en ningún tipo de prestigio, pero cuando ninguna serie lo tenía, no solo conocíamos a Topacio, a Cristal y a Kassandra, sabíamos quién era Delia.
Puedes seguir EL PAÍS TELEVISIÓN en Twitter o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma

Más información
Archivado En
Últimas noticias
La policía registra varios domicilios y las oficinas de la ministra francesa Rachida Dati por otro presunto caso de corrupción
Un tribunal envía a la cárcel a los exministros Luis Fernando Velasco y Ricardo Bonilla por el entramado de la UNGRD
Sheinbaum pide que se revise la constitucionalidad de la ley de paridad de San Luis Potosí
La muerte de la jueza ‘influencer’ que denunció acoso laboral estremece a Colombia
Lo más visto
- Los hijos de Isak Andic negocian un acuerdo para pagar 27 millones a la pareja del empresario y cerrar el conflicto por el legado
- La población de pumas de la Patagonia se dispara gracias a una presa inesperada: los pingüinos
- Irene Escolar: “Si la gente se droga es porque encuentra en ello una anestesia que necesita. Negarlo es absurdo”
- El Supremo ordena al ex fiscal general el pago de la multa y la indemnización a la pareja de Ayuso que le impuso al condenarle
- Carlos Alcaraz y Ferrero rompen tras siete años: “Llegan tiempos de cambio para los dos”































































