Alimentar a tu mascota desde el trabajo y otras ventajas de la tecnología
Los dueños de animales domésticos pueden conocer la ubicación exacta de estos en tiempo real, controlar su estado de salud o reforzar su desarrollo
La imaginación en el desarrollo de nuevas aplicaciones y dispositivos tecnológicos carece de límites. Incluso, cuando se dirigen al reino animal. En los últimos años, un sinfín de fabricantes y desarrolladores de apps, probablemente, con mascotas en casa, han tenido la feliz idea de crear gadgets útiles para que los seres menos adictos a la tecnología también puedan disfrutar de las ventajas que brinda. Desde collares y comederos inteligentes, hasta juegos interactivos y coches con "modo mascota", estos productos desempeñan interesantes funciones a la hora de cuidar la salud, la seguridad, la alimentación y, en general, de mimar a los animales de compañía.
Uno de los problemas a los que se enfrentan las personas con animales de compañía es el hecho de no poder alimentar a su mascota con las dosis recomendables cuando van a pasar el día fuera de casa. Frente a la solución tradicional de dejar un plato repleto de comida para todo el día, existen comederos inteligentes que permiten dar alimentar al animal desde el móvil. Un ejemplo es el Petwant, un dispensador que libera la cantidad de comida seleccionada por el usuario a la hora programada o en el momento en que se le ordena desde la aplicación. Además, incorpora una cámara y un micrófono, de forma que el dueño del animal puede, literalmente, llamar a su mascota a comer, y observar cómo lo hace para quedarse tranquilo.
Otros dispositivos, como el el Petnet, además de suministrar la comida, informan acerca de las necesidades nutricionales de cada animal en función de su peso, raza, edad y nivel de actividad gracias a una base de datos. El precio de este dispositivo ronda los 135 euros. El Petkit es más sencillo y económico, ya que no cuenta con control remoto para alimentar al animal, pero su báscula inteligente permite controlar las cantidades de comida que necesita. Además, su aplicación puede registrar los datos del animal para realizar un seguimiento de su estado físico. El dispositivo tiene un coste de unos 35 euros.
Para que nunca se pierda
En ocasiones es complicado controlar en todo momento a nuestro perro durante los paseos nocturnos, especialmente si tiene el pelaje oscuro y el trayecto está poco iluminado. También lo es durante las excursiones diurnas, si nos movemos con nuestra mascota por la montaña, por la ciudad o por otras zonas con puntos ciegos. Para evitar que se vaya demasiado lejos o, simplemente, para minimizar el estrés que causa el miedo a perderlo, algunos fabricantes han lanzado al mercado collares y arneses inteligentes que permiten tener al animal localizado en todo momento.
Algunos utilizan iluminación LED, continua o parpadeante, para un control visual. Otros van un paso más allá e incorporan tecnología GPS, que ayuda al dueño a encontrar al animal con el móvil cuando lo ha perdido de vista por completo. Por ejemplo, el Hangang Collar, que vale unos 40 euros y envía una señal al móvil si se aleja más de 150 metros. Además, incorpora un micrófono para que el dueño pueda escuchar el sonido ambiente que rodea a la mascota y encontrarlo más fácilmente. Otros, como el Tkstar Tracker, que requiere una tarjeta SIM para funcionar, permite elegir a qué distancia del animal envía el aviso el smartphone. Este ronda los 50 euros, como el collar de Kippy Vita, pensado para perros y gatos, que actualiza la localización cada cuatro segundos. El collar localizador Kyon avisa a partir de los 90 metros y, además, informa de la ubicación exacta de la mascota. Vale unos 220 euros.
Hay rastreadores, como Tractive, que muestran la situación geográfica del animal en tiempo real y a cualquier distancia del mismo, siempre y cuando se mueva en una zona con cobertura móvil. Este dispositivo en concreto ronda los 50 euros y también se puede programar para que haga saltar las alarmas del smartphone si la mascota ha abandonado una zona previamente establecida por su dueño, como su casa, un jardín o un barrio residencial. Esta función puede ser de utilidad para controlar a los perros con tendencia a escaparse y también a los gatos que se mueven libremente por los alrededores del hogar.
Salud y ejercicio físico
Los animales no siempre exteriorizan las sensaciones de fatiga, cansancio o malestar. Existen dispositivos que ayudan a los dueños a conocer el estado de salud de su mascota, como el Dinbeat PRO, un arnés inteligente con sensores de temperatura, frecuencia cardíaca, respiración por minuto, actividad, posición y ladrido. Este sistema está pensado para “ayudar a los veterinarios a monitorizar el estado de salud de los animales de compañía”, según explican los creadores en su página web, ya que registra y digitaliza todos los datos, creando un historial útil para las revisiones médicas.
La sensibilidad de los animales a las temperaturas extremas, especialmente, al calor, ha llevado a más fabricantes a idear dispositivos con termómetro para las mascotas. Tesla ha dado un paso más allá con el “modo mascota” de su Model 3, una nueva actualización de software que calcula y mantiene la temperatura óptima para que podamos dejar al perro dentro del coche. Esto minimiza el riesgo de que sufra un golpe de calor, según explica la compañía en su web, “pero no está pensado para dejar al animal durante horas sino para realizar algunos recados puntualmente”, recalca.
Además de controlar la temperatura e informar de las constantes vitales del animal, existen dispositivos, como el Monitor PitPat, que ayudan y promueven la realización de ejercicio físico. Funciona de forma similar a las aplicaciones deportivas para personas, ya que analiza los hábitos sedentarios y activos del usuario, calcula las calorías ingeridas y las quemadas y aporta información sobre qué tipo de rutinas debe seguir según sus características físicas.
Más inteligencia, menos aburrimiento
Para potenciar el desarrollo físico y cerebral de nuestro perro o gato, y de paso, amenizar los largos ratos que pasa solo en casa, hay algunos juguetes que no necesitan la participación del dueño. PremierPet ha diseñado algunos para felinos, como su láser móvil o su ratón electrónico, que, además de entretenerlos, estimulan sus reflejos y habilidades de caza. CleverPet, con un precio que ronda los 220 euros, es una consola de juegos para perros. Este dispositivo de entretenimiento canino incorpora rompecabezas de colores cuyo nivel de dificultad se puede seleccionar dependiendo de la habilidad del animal.
Pensando en las mascotas más activas, existen lanzadores de pelotas, como iFtech, que se dispara cuando el perro mete una bola en la canaleta. El coste de estos productos está en torno a los 100 euros. PupPod, un juguete que se controla desde el móvil, ronda los 50 euros y ofrece recompensas al animal cuando resuelve un rompecabezas, además de registrar los resultados en la aplicación.
Otra opción es PetChatz, un dispositivo con cámara, pantalla, micrófono y altavoz que permite al dueño y la mascota verse y oírse mutuamente. Vale cerca de 280 euros y “es una experiencia interactiva completa con videochats, calmantes, tratamiento de aromaterapia y juegos para el cerebro”, según indican los creadores en su página web.
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